Augusto Tejada: “Joaquín y la China fueron grandes colaboradores”

Su nueva película fue rodada en Uruguay.

El duelo, con Joaquín Furriel y Eugenia Suárez, está dirigida por Augusto Tejada. En exclusiva, dialogamos con él para conocer más de la cocina de la producción.

—Contame un poco, ¿cómo fue dirigir esta locura que tiene este ritmo tan vertiginoso? Porque es difícil hacer comedia…

—Muy difícil hacer comedia. Dirigir esta locura fue para mí un verdadero desafío. Por los actores que tenía, por el tiempo que teníamos para firmar la película.

—¿Fue poco?

—Fueron cinco semanas para una película de este tamaño. Es bastante justo, teníamos muchas escenas en muy poco tiempo y teníamos que tratar de encontrar dónde dar con el dardo para que todo fuera por el sendero que imaginábamos. La verdad que Joaquín y la China en ese sentido fueron grandes colaboradores. Y todo el tiempo, cada mañana nos sentábamos en el motorhome a repasar las escenas del día y traían propuestas, estaban muy metidos en lo que estábamos haciendo y la química y la buena onda que hubo en general en el rodaje hizo que siempre estuviera a la predisposición hacer algo divertido. Entonces todo el tiempo estábamos, bueno, la escena es esta, vamos a jugar. Desde lo visual y las actuaciones, el guion, lo físico, la verdad es que eso hizo que fuéramos siempre por hacer algo que nos gustara a nosotros, digamos, básicamente.

Después algo que ayudó mucho es que la producción me dio ahí la posibilidad de filmar cronológicamente, que eso en una película no existe, básicamente, pero por cómo estaban planteadas las semanas por las agendas, coincidir con las agendas de los actores de este calibre, la verdad que es un chino. Así que el hecho de hacer cronológico el rodaje hizo que pudiéramos, de alguna manera, empezar a encontrar el personaje y la película a medida que le íbamos filmando. Y cuando pasa una semana y decís, qué bueno lo hicimos esta semana. Reviso yo, volvía a mi casa, veía lo que filmábamos, preparaba el día siguiente. Y así va pasando y vas como encontrando solidez en lo que vas viendo. Bueno, a mí eso me dio mucho coraje y hoy, con la película terminada, me da mucho orgullo.

—¿Ibas montando en paralelo? ¿Ibas armando algo?

—Mirá, el editor no podía montar en paralelo, pero podía ir armando bloques de escenas.

—Que al ser cronológico era como más fácil...

—Exactamente. Entonces, obviamente que cuando arrancás haciendo armados de bloques durante un rodaje no tenés música, no tenés sonido, ves algo muy muy crudo, pero ya te dás una idea de por dónde venía y si lo que estábamos haciendo y la apuesta era por ahí o no. Eso hizo agarrar la confianza en lo que estaba haciendo y dijera, bueno es por acá, a mí me gusta, después le puede gustar al otro no, pero para mí es esta la película y bueno, ahí quedó.

Noticias Relacionadas