David Lebón, un prócer del rock

El ex-Serú Girán está en plena gira nacional presentando un show con temas clásicos y actuales. Antes de su visita a La Plata, se expresó sobre su vasta trayectoria

Es un vocalista brillante, guitarrista intuitivo, bajista asumido y baterista por vocación que se define como “creativo y desordenado”. Integró bandas emblemáticas como Los Gatos, Pappo’s Blues, Color Humano, Pescado Rabioso y Serú Girán. David Lebón tiene un sello propio. Es un grande entre grandes que supo compartir diversos escenarios y producciones discográficas con íconos de la música como Charly García, Nito Mestre, Luis Alberto Spinetta, Celeste Carballo, Piero, Fito Páez y Javier Calamaro, entre otros. 

Tras ese vasto recorrido, Lebón se tomó un prolongado descanso y se ausentó del ambiente. En ese receso, divisó cuál era su lugar en el mundo y tomó la decisión de regresar con todo. Ahora, terminó Encuentro supremo, su último trabajo que saldrá a la luz a fines de noviembre.

En una entrevista con este medio, el músico se expresó sobre el disco que estrenará próximamente y las presentaciones actuales, en las que realiza un recorrido por toda su carrera.

—¿Qué podés contarnos sobre Encuentro supremo?

—Es mi último disco. Estoy muy feliz con el sonido, con la banda y con las canciones que están bárbaras, me encantan. Es un trabajo muy fluido. A través de los temas nuevos uno puede encontrarse con uno mismo y ser feliz de la mejor manera que pueda. Así que es eso lo que significa para mí. 

—¿Cómo fue la producción del nuevo material?

—Comenzó cuando hice los demos, algunos en 1987 y otros en estos años. Son canciones que compuse cuando estuve en Miami y otras son de los últimos doce años que viví en Mendoza. Algunas son de ese tiempo y otras fueron mejoradas. 

—¿El disco es una obra de arte en su totalidad o cada canción lo es por sí misma?

—Para mí, una obra de arte es una pintura. Esta obra simplemente son canciones, con una letra simple y entendible, con la que apuntamos a construir un mundo mejor y aprender a vivir de otra forma. 

—¿Te quedaron cuentas pendientes?

—Sí, miles de cuentas por pagar. En general, creo que las cosas son como son. Algunas oportunidades no las vi o lo hice de otra manera porque era joven, quizás por eso se pasaron tan rápido. Es como un pelado con una trenza en la frente, una vez que pasa no podés agarrarlo. 

—¿Integrás herramientas tecnológicas en tus procesos creativos actuales?

—Creo que vivimos en una búsqueda constante y lo mismo sucede en la música. Uno experimenta, prueba y usa los soportes digitales para registrar o guardar las ideas y poder retomarlas después. La música es una cosa hermosa, complicada, es difícil inspirarse en un mundo tan complejo, donde la gente está triste por las cosas que pasan y uno tiene que trabajar para hacer la vida un poco más llevadera. 

—¿Cómo es el tránsito por esta vida con la ausencia de tus grandes compañeros de ruta?

—Han sido años difíciles. De mi padre y mis amigos extrañaré su forma física, la rutina, las conversaciones, las complicidades, el cotidiano, ser parte del grupo de amigos. Se han ido Pappo, Cerati, Oscar Moro, Spinetta, Bowie.

—A través de los años, ¿qué relación lograste establecer con el público?

­—Me considero un afortunado porque aún siento la calidez y el amor de la gente. Logré tocar en los mejores grupos que hubo en el país y, con eso, soy más que feliz. 

Encuentro supremo

David Lebón brindará un show con sus bellas canciones en nuestra ciudad. La cita obligada es el viernes 11 de noviembre, a las 21, en El Teatro Bar, calle 43 n°632 entre 7 y 8.