El fin de una batalla legal

El exnovio de la hija de Whitney Houston fue demandado por la muerte de la joven. Ahora, la Corte lo encontró “legalmente responsable”  

En 1992, Whitney Houston y Bobby Brown contrajeron nupcias. La pareja de estrellas de la música supo protagonizar más de un escándalo. Durante la unión mantuvieron un vínculo agresivo y complejo, atravesado por las adicciones de ambos a la cocaína, los calmantes y el alcohol. Pasaron los años y el matrimonio no funcionó, entonces en el año 2007 decidieron separarse.   De esta unión nació Bobbi Kristina, quien fue criada por diferentes niñeras y algunos familiares, ya que sus padres no podían mantenerse sobrios. Al respecto, Bobby Brown, el exesposo de Whitney y padre de la primogénita, dijo: “Nuestra hija crecía en medio de todo esto. A menudo ella veía a su padre y a su madre drogados. Tratábamos de alejarla, pero se nos hacía difícil verla solo en los pocos momentos en que estábamos sobrios”.

En 2012, Whitney falleció de una sobredosis y Bobbi Kristina quedó al cuidado de su padre. Con el transcurso de los años, la adolescente no pudo esquivar el consumo de drogas y debió internarse en reiteradas oportunidades en la clínica Ford. En ese mismo año conoció a Nick Gordon y el flechazo fue inminente. Formalizaron el noviazgo y decidieron convivir en la mansión de la fallecida cantante. Las peleas no tardaron en llegar y fueron protagonistas de algunos episodios de violencia doméstica. Una noche fría del 2015, la heredera y su novio discutieron. Al día siguiente, ella, de 22 años fue hallada inconsciente en la bañera de su casa y, tras seis meses de estar en coma, falleció en julio de ese año. 

En este contexto trágico, Bedelia Hardgrove, tutora de la joven, presentó una demanda contra Nick Gordon, acusándolo de haber provocado la muerte de Bobbi Kristina. Según los resultados de las pericias médicas, la fallecida consumió un cóctel tóxico de drogas y medicamentos. 

El juez de la causa dictaminó que el acusado es legalmente responsable de la muerte de su novia. Ahora, los familiares de Houston exigen a Gordon el pago de una indemnización de 50 millones de dólares por daños y perjuicios, así como la devolución de objetos que eran propiedad de la joven. 

Por último, el padre de Bobbi Kristina fue entrevistado a la salida del tribunal y se expresó respecto a la sentencia: “Estoy complacido con el resultado de los procedimientos de la corte . Todo lo que siempre he querido saber son las respuestas relacionadas al por qué y qué causó la muerte de mi hija”. También señaló que nunca tuvo dudas de la culpabilidad de Nick Gordon y que solo resta sobrellevar el dolor de la pérdida: “Necesito procesar todas las emociones que tengo y apoyarme en Dios para que me ayude a superar esto junto con mi familia”.