Eugenia Suárez, seducida y abandonada

La actriz se refugia en sus hijos mientras cumple con sus obligaciones laborales. Tras el escándalo amoroso, se quedó sin aventuras ni amigas.

De forma reciente, Eugenia Suárez y Benjamín Vicu­ña decidieron finalizar su relación de pareja y cada uno continuó por su camino.

Así lo informaron a través de un comunicado en las redes sociales y la noticia no acarreó muchas sorpresas, puesto a que se sabía de las andanzas de los dos.

Sin embargo, Eugenia viajó junto a sus hijos con rumbo a España, donde debería cumplir con sus obligaciones laborales en una ficción sobre la trata de personas. Este proyecto significaba la entrada por la puerta grande al mercado extranjero. Ni lerda ni perezosa, Eugenia usó sus dotes para conquistar al futbolista Mauro Icardi que también tuvo sus mismas intenciones.

Tras una serie de chateos, la pareja se encontró en una noche parisina de hotel para darle rienda suelta a sus pasiones más rebeldes. Nadie sabe qué sucedió exactamente en esa vez, pero la tormenta aún acecha puesto a que Wanda Nara descubrió la infidelidad de su esposo y ahora va por todo. Primero enfrentó a la tercera en discordia mediante una serie de publicaciones digitales. También la llamó por teléfono e intentó buscar explicaciones al respecto.

En estas instancias, el deportista solo pedía perdón y hacía lo imposible para que la familia ensamblada continuara bajo el mismo techo. Por su parte, Eugenia escribió un comunicado para defender su buen nombre y esta acción fue apoyada por su ex, el chileno Vicuña.

Ahora, la empresaria Nara trabaja en el lanzamiento de su marca y estaría considerando perdonar a su esposo pero aún no se explicita sobre ello. Solo se sabe que duermen por separado y también trascendió que charlaron respecto a la división de bienes en el caso de un divorcio próximo.

Por su parte, la China se quedó sola, sin amigas, porque su mesa chica conformada por Zaira Nara, María del Cerro y Paula Chaves optó por dejarla de lado por sus conductas y prefieren mantenerse al margen. De esta manera, la única que tomó una actitud algo objetiva fue Lali Espósito, con quien aún mantiene buenas migas y no se metió en este lío de cama. En este tramo, otras mujeres habrían contactado a Wanda para confirmarles que también se enteraron de que sus esposos mantenían conversaciones con la actriz que enviaba videos practicando la masturbación en los estudios de cine donde rodaba la ficción española. Entre ellas, se destaca Chechu Bonelli, que de forma reciente habría hablado con la indicada como “rompehogares” para aclarar los tantos de la situación.

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