Metallica, el gran aprobado del Lollapalooza

Tras dos días intensos se cerró la cuarta edición del festival. La primera fecha fue la más pareja, mientras en la segunda The Weeknd y The Strokes no se lucieron demasiado con sus shows

Con la espalda curtida por haber hecho cuatro festivales internacionales, los organizadores del evento pueden estar más que satisfechos en lo que respecta a estructura y convocatoria. Con una concurrencia estimada que rondó las cien mil personas por día, siendo el viernes la fecha más elegida, y el montaje de cuatro escenarios con muy buen sonido, concluyó un nuevo Lollapalooza en el país. 

Incluso superó las expectativas  del organizador de este “monstruo”, Perry Farrell, que eligió referirse al tamaño del festival como “una ballena, porque son lindas” y le aseveró a este medio que se fue contento por juntar “tanta gente diferente”. 

Cuando se empieza a hilar fino, el primer día le sacó una importante ventaja al sábado, con las presentaciones sublimes de Metallica y Rancid, responsables de una impresionante convocatoria. “No nos importa de qué religión o inclinación política son, son parte de la familia de Metallica”, anunció James Hetfield, el líder de la banda en el medio del show.

Bastante más floja fue la presentación de los dos grandes referentes del día sábado, The Strokes y The Weeknd, que no dejaron a todos muy satisfechos. Primero fue el turno del canadiense, que se bancó el escenario solo, pero su recital fue bastante monótono y hasta hubo quienes deslizaron la posibilidad de que haya hecho playback. Por el lado de la agrupación liderada por Julian Casablancas, si bien el espectáculo aprobó, fue un poco empañado por la duración del mismo, ya que se subieron quince minutos después de lo previsto pero debieron respetar el horario de finalización.

“Mirar desde el costado del escenario no es la experiencia correcta”

Así lo afirmó Oliver Sim, de la banda británica de indie pop The XX, que antes de su show dialogó en exclusiva con diario Hoy. “El público en Londres es más reservado”, afirmó Sim, quien se mostró sorprendido por la energía y pasión de los argentinos.

—¿Qué significan para vos estos festivales?

—Pienso en el primero al que fui, el más emocionante de mi vida, donde vi a la gente que me gustaba, que se volvieron personas reales. Fue muy intenso, era The White Stripes, yo estaba obsesionado con Jack White, y escucharlo ahí le aportó un sentido nuevo a sus canciones. 

—¿Qué tiene Inglaterra para que surjan tantas bandas?

—No sé, porque es un país muy chico. Si pienso en Londres, mi hogar, es un lugar muy diverso, es una ciudad que ofrece muchas culturas y estilos de música, hay bandas que están surgiendo y muchos jóvenes creativos. 

—¿Cómo te fuiste involucrando en la música?

—Empecé a ver conciertos en bares cuando tenía 13. Una buena cosa es que no estaba encerrado en un género, había diversos estilos disponibles para mí, como Queens of the Stone Age, Placebo, mucho r&b, y música que compartí con mis padres. Hoy con internet hay más acceso, eso definitivamente me abrió los ojos. La música me conforta, es una buena forma de escapar y creo que especialmente ahora, en este momento del mundo, mucha gente necesita una vía de escape, lo que es un poco triste, aunque también es lindo lo que el arte y la creatividad pueden hacer.

—¿Qué bandas te interesan de las que se presentaron este fin de semana?

—Definitivamente admiro a The Strokes, fueron parte de mi adolescencia y crecí con ellos. Además, hace dos días vi a Metallica por primera vez, en Brasil, y fue una de las cosas más increíbles que viví. Eran ellos y cuatro amplificadores, pero estuvo muy comprometido con el público. Lo vi metido entre la gente, me puse la capucha (risas) y estuvo bien. Mirar del costado del escenario no es la experiencia correcta.

—¿Cómo viviste la visita al país?

—A veces la peor parte del trabajo es ir a un lugar nuevo y no tener tiempo para conocer, pero esta vez llegamos al país la noche anterior al recital y tuve todo el día siguiente para hacer lo que más me gusta: perderme. Estuve caminando sin saber a dónde iba, vi lugares lindos y tuve como veinte conversaciones con personas totalmente desconocidas.

La primera vez de Vance Joy

Por primera vez se presentó en el país el australiano James Keogh, conocido por su nombre artístico, Vance Joy, que mientras aprendía a pronunciar correctamente “está buenísimo estar acá” para decirlo en su show, le contó a diario Hoy las sensaciones de la visita.

—¿Cómo te preparaste para la fecha?

—De los últimos dos festivales que estuvimos en Brasil y Colombia el público era muy entusiasta, pero me habían dicho que el argentino es el mejor, así que traté de no adelantarme a lo que se venía. No miro cuánta gente hay antes de tocar, sino cinco minutos antes de subirme al escenario, así que trato de pasarla bien, hacer lo mejor posible y que los que están disfruten.

—¿Qué conocías de la cultura local?

—Conozco los grandes jugadores de fútbol que tienen, y estuve caminando por Palermo. Buenos Aires es una linda ciudad, con buena comida, buen vino, lindas construcciones.

—¿Y del rock argentino?

—No conozco los nombres de las bandas, pero escuché un poco de música argentina por mi sonidista, y me gustó lo que me mostró.

La presencia local en San Isidro

Para varias bandas fue la primera vez en un evento tan masivo, y muchas estuvieron a la altura de las circunstancias, como la metalera Deny que, si bien tuvo la difícil tarea de inaugurar el primer día, concentró una considerable cantidad de gente y brindó un espectáculo muy bueno. Algo similar ocurrió con La Yegros, que se mostró sorprendida por cómo respondió el público cantando y bailando su música y aseveró que era un honor formar parte del line up.

Fue, asimismo, un gran momento para El Plan de la Mariposa, una agrupación oriunda de Necochea que en los últimos años ha crecido a pasos agigantados. “Es una buena oportunidad para mostrar lo que hacemos y hoy varias personas vinieron, lo que nos generó mucha adrenalina”, afirmó Sebastián Andersen, cantante del grupo. Además, adelantó que tienen el nuevo disco casi listo, que en junio se irán de gira a Alemania y, al regreso, pasarán por La Plata una vez más.

Por supuesto, no faltaron los músicos con más recorrido artístico como León Gieco, con un gran show el viernes, cargado de mensajes en favor de las Abuelas de Plaza de Mayo, y en campaña contra la violencia a las mujeres y el cyber-bullying. 

También estuvo Lisandro Aristimuño, quien dijo presente con su música y no quiso perderse la oportunidad de disfrutar de la presentación de The Strokes, que según afirmó, es la banda que más quería ver. Además brindó su show Palo Pandolfo, de reciente paso por la ciudad, quien aseguró: “Fue agotador, porque pusimos toda la carne al asador”.

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