Natalie Portman: nace una nueva líder en Hollywood

La intérprete recordó sus inicios en la industria y habló de “terrorismo sexual”. Junto a otras famosas del movimiento Time’s Up, les respondió a sus colegas francesas, quienes las habían acusado de “puritanas”

Parada sobre el escenario frente a miles de mujeres, Natalie Portman recordó cuando, a los 13 años, abrió la carta de un fan, un hombre que le contaba sus deseos de violarla, mientras una radio iniciaba la cuenta regresiva para su cumpleaños número 18, edad en la que sería legal acostarse con ella, y los críticos de cine hablaban de sus pechos. Acababa de estrenar su primera película, El perfecto asesino, y la emoción se convirtió en terror. “A los 13 años, el mensaje de mi cultura estaba claro: sentía que tenía que cubrir mi cuerpo e inhibir mi expresión (…) para mostrar que era alguien digna de ser respetada”, leyó la actriz de una hoja sostenida en sus manos nerviosas. En su voz ya no había miedo: “Me gané la reputación de moralista, conservadora, nerd y seria, en un intento de sentir que mi cuerpo estaba seguro y que mi voz sería escuchada”. 

El discurso estremeció a las presentes durante la Marcha de las Mujeres en Estados Unidos, y dio nuevo impulso al movimiento feminista que ha comenzado a disputar el poder en Hollywood, luego de las críticas de las artistas francesas, quienes las acusaron de “puritanas” por no aceptar el “coqueteo” varonil. Portman, que forma parte de la organización Time’s Up junto a otras famosas, les contestó: “A estas personas les quiero decir: el sistema actual es puritano. Quizá los hombres pueden decir y hacer lo que quieran, pero la mujer no”. 

Como sucedió con Oprah Winfrey tras su discurso en los Globos de Oro, Natalie Portman ha utilizado su prestigio para dar voz al movimiento de mujeres, cambiando glamour por furia militante. Así cerró la actriz el parlamento que la encumbró como una nueva líder en Hollywood: “Un mundo en el que pueda llevar lo que quiera, decir lo que quiera y expresar un deseo sin temer por mi seguridad física o mi reputación será el mundo en el que el deseo y la sexualidad femenina tengan su máxima expresión. Ese mundo que queremos construir es lo opuesto al puritanismo”. 

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