ENTREVISTA
Victoria Ponce presenta Las visitas
La presentación del libro contará con la presencia de Lucas Vanza.
La obra Las visitas surge gracias a la pluma de Victoria Ponce, escritora y oriunda de Azul, y es por ello que fue entrevistada por este multimedio. La cita obligada para conocer esta producción será el jueves 19 de mayo en La Bicicletería, el centro cultural ubicado en 117 y 40. Además, la velada contará con la música acústica de Lucas Vanza.
—¿Cuál es la génesis de tu obra?
—Se trata de un conjunto de cuentos bastante diversos entre sí en relación a los estilos y los géneros. De esta manera, junto a Pablo Castro, uno de los editores de Cuero, comenzamos a pensar, y seleccionar una temática para luego terminar en un paisaje en común. En realidad, son cuentos que son provincianos, es decir que transcurren en un territorio de provincia, en el campo. Son como cuentos rurales. En este sentido, los textos que le presenté tenían una temática recurrente, un campo de fondo común y cosas que funcionaban cosas, que se repetían, que hablan, de una forma consciente o inconsciente, persisten en mi escritura o estas historias. Entonces puedo decir que Las visitas fueron armadas a partir de una selección de escritos donde está presente este retorno al campo, a la ida de la ciudad. Todo está en ese filtro. Es más eran parte de un registro más extenso que tenía de otro libro, entonces del conjunto elegimos los seis cuentos que integran este proyecto.
—¿Creés que es necesario un libro que marque la impronta de lo rural?
—No hay una deliberación o decisión previa, arbitraria. No es necesario. Si bien hay una preponderancia ante las temáticas urbanas que son elegidas por los lectores, hay de todo, para todos los gustos. Creo que si bien hay cosas determinadas que son ayudadas por la publicidad, se van metiendo más, en general los que preferimos otras lecturas mantenemos, germinamos ese otro estilo que bueno tan válido como otros. Estoy en esa, pero ni bien empecé con otro cuento también había textos más relacionados con lo policial. Hay que ir explorando para que las cosas se diversifiquen y haya de todo. Pero bueno, concretamente en Las visitas hay una vuelta, un viaje al campo. Esa es la propuesta que encuentra el lector.
—¿Por qué aparece ello en la narrativa?
—No fue accidental. Soy de Azul y recojo mi experiencia. También los relatos familiares. En parte son el punto de inicio que luego reelaboro y son ficcionales. Tienen su origen allí, en el hogar. No se trata de una biografía ni nada, son disparadores y frases, dichos que quedaron, me persiguieron y allí plantee hacer algo con ello con las ficciones. Con lo que imaginé o fantaseé. Esto creo que le pasa a todos los que escriben, es decir que inician desde algo que escribieron, les contaron, imaginaron o soñaron, entre otros. No hay una pretensión de autobiografía que decidí no hacer. No hay un alter ego en los textos, son personajes.