Ciencia
Descubren un nuevo mineral en un meteorito de la Luna
La investigación fue llevada a cabo por un equipo de científicos alemanes. El hallazgo fue bautizado “Donwilhelmsita” en honor al geólogo estadounidense Don E. Wilhelms.
Una vez más la ciencia ha de-satado un torrente de reflexiones y análisis que tienen como común denominador la intención de ampliar los contornos difusos de conocimiento que tenemos no solo respecto a nuestro planeta, sino también sobre la Luna. En este sentido, un equipo de científicos europeos anunció el descubrimiento de un nuevo mineral de alta presión en el meteorito lunar “Oued Awlitis 001”.
Los hallazgos realizados por el equipo presidido por Jörg Fritz del Centro de Investigación de Impactos y Cráteres de Ries Nordlingen (Zerin) y sus colegas del Centro Alemán de Investigación en Geociencias (GFZ), ambos de Alemania, fueron publicados en la revista científica American Mineralogist.
En este caso, además de los 382 kilogramos de rocas recolectadas por las misiones Apolo, los meteoritos lunares permitieron obtener valiosos conocimientos sobre la formación de la Luna.
Según explicó Fritz, algunos de estos meteoritos experimentaron temperaturas y presiones particularmente altas y las condiciones físicas extremas condujeron a un derretimiento de áreas microscópicas dentro de estos meteoritos.
Los minerales descubiertos en el transcurso de la investigación -la wadleyita, la ringowoodita y la birdgmanita- representan grandes partes del manto de la Tierra. Estos cristales, luego, fueron sintetizados en experimentos de laboratorio de alta presión; como minerales naturales fueron descritos y nombrados por primera vez en base a su presencia en meteoritos.
El nuevo mineral fue bautizado en honor al geólogo lunar Don E. Wilhelms, un científico estadounidense involucrado en la selección de los sitios de alunizaje y en el análisis de datos de las misiones espaciales Apolo que trajeron a la Tierra las primeras muestras de roca de la Luna.
Los hallazgos científicos nunca se agotan como un fin en sí mismos. A pesar de la parálisis forzada que nos impuso la pandemia, el avance en las investigaciones científicas nos permiten profundizar el conocimiento del mundo que nos rodea.