La Plata

Intenso debate por el paso bajo nivel de 1 y 32

Los ingenieros responsables del proyecto para la mejora integral del ferrocarril Roca, Francisco Bissio y Marcos Cipponeri, brindaron ayer una charla sobre el plan de obras a ejecutar, que incluye el controversial cruce ferroviario entre ambas avenidas

Francisco Bissio, responsable ejecutivo del proyecto de mejoras en el ferrocarril Roca, y Marcos Cipponeri, encargado de estudiar su impacto ambiental, se presentaron pasadas las 18 frente a un auditorio repleto en el salón cultural de Seguros Rivadavia (7 y 47). 

La razón de esta inusual atención es el paso bajo nivel proyectado para la línea ferroviaria Roca en 1 y 32, iniciativa que generó una larga controversia en la comunidad del barrio de Tolosa y cruces entre dirigentes políticos municipales. 

El sector que está en contra alega que el paso bajo nivel profundizaría la fractura urbana de la ciudad a ambos lados de la avenida 1 y que su construcción implicaría una masiva destrucción del espacio verde. 

Por su parte, aquellos que están a favor piensan que, de este modo se evitarían los cruces caóticos en la intersección de las avenidas y que se agilizaría notablemente el tránsito vehicular.

La fractura urbana

En diálogo con Hoy , ambos ingenieros negaron que su proyecto profundice la herida urbana producida por el ferrocarril. “Las vías estuvieron ahí desde el origen de la ciudad, nosotros no somos responsables de un hecho que es previo al proyecto. Lo que queremos es atenuar ese impacto negativo, conectando tanto peatonal como vehicularmente ambos lados de La Plata”, expresó Bissio.

Su proyecto implica la construcción de dos ramblas que absorban el tráfico de 32 mientas el tren pasa por sobre los vehículos. Esto tendría un costo aproximado de 250 millones de pesos e implicaría la eliminación de la conexión entre el centro platense y Tolosa por calle 2. 

El proyecto alternativo, que muchos vecinos promueven con manifestaciones callejeras y recolección de firmas, es la entrada soterrada del tren hasta 1 y 44. Esta idea tiene su origen en el Decreto N°1683, aprobado en 2005, y cuyo defensor más reconocido es el licenciado Gustavo Cremaschi, jefe de cátedra en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UNLP. La distancia entre la estación de Tolosa y la de La Plata es de 2,2 kilómetros, ambas cruzadas por tres pasos bajo nivel en 528, 32 y Plaza Alsina (1 y 38). La propuesta de este sector es hacer que las vías pasen por debajo durante todo este trayecto, hecho que no solo agilizaría el tráfico sino que cerraría definitivamente la mencionada grieta.  

“Ese proyecto es inviable, los costos y el impacto ambiental son incalculables. Por otro lado, estos trabajos tardarían entre 5 y 8 años en ser finalizados, causando molestias permanentes”, expresó Cipponeri. 

Esta división causó un intenso y respetuoso debate y, en la charla organizada por la agrupación Impulso Radical, parte del auditorio y los conferencistas intercambiaron puntos de vista sobre la álgida cuestión urbana. “Con el paso bajo nivel, el traslado peatonal de un lado a otro de la avenida demorará 90 segundos, sin ningún riesgo como puede suceder ahora”, expresó Bissio. 

Por otro lado, recientemente la Facultad de Ingeniería de la UNLP comenzó la elaboración de un proyecto de construcción de tres pasos bajo nivel más, en 1 y 38, Camino Centenario y 496 de Gonnet y 415 bis y 1 de Villa Elisa. 

Plan integral de obras

Los ingenieros destacaron que el plan integral de mejora del ferrocarril es un proyecto que se realiza por un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo y que incluye el reacondicionamiento de los talleres de alistamiento y depósito de Tolosa y la ejecución del viaducto de Ringuelet, obra que está actualmente en un 90% de ejecución. 

El plan maestro implica también la modernización de la estación de La Plata con pantallas informativas, elevación de andenes e intervención en el entorno. Se espera que, con la llegada de las vagones eléctricos chinos CSR en diciembre, el espacio ya esté en condiciones. 

Noticias Relacionadas