cultura
Las excentricidades del Rey Ferrante I
El rey Ferrante I murió a los 71 años
Para tener una idea de lo que llegó a ser el más grandioso lujo de las fiestas en la Italia del siglo XV, basta leer la descripción del banquete que el 16 de febrero de 1476 dieron a los hijos del rey Ferrante I, en Nápoles, el florentino Benedetto Salutati, nieto del famoso canciller, y sus socios comerciales.
La escalera del palacio estaba cubierta con ricas colgaduras, tejidos y guirnaldas de tejo y la gran sala, adornada con tapices llenos de figuras; del techo, tapizado con los colores de la corona de Aragón, pendían dos grandes lámparas de madera tallada y sobredorada, con gran profusión de velas de cera. Frente a la entrada principal, sobre una tarima cubierta con alfombras, alzábase la mesa sobre las que se tendían los finísimos manteles de lienzo. Otra de las paredes aparecía cubierta por un gran aparador, en el que se exhibían unas ochenta piezas de arte, aparte de la vajilla de plata destinada al servicio. En total, había trescientos platos de diversas clases, escudillas, copas y bandejas. Los vinos servidos en este banquete eran casi todos sicilianos y, al lado de cada comensal, figuraba una lista con más de quince clases. Durante el banquete, se los entretuvo con música y mascaradas.