Los dramas de García Lorca

Más de cuatro mil piezas de Federico García Lorca fueron declaradas como Bien de Interés Cultural. La gran mayoría de los dramas del poeta granadino están inspirados en hechos reales. Pero tal vez nunca las fuentes fueron tan nítidas como en Bodas de sangre. La obra se estrenó el 8 de marzo de 1933, en Madrid, aunque el tema rondaba a Lorca desde 1928, cuando leyó la noticia del asesinato cometido cerca de Níjar, Almería, poco antes de que se celebrara una boda. Ian Gibson, en su extensa biografía sobre el poeta y dramaturgo español, sostuvo que el autor leyó por primera vez la historia en el diario ABC y siguió los pormenores de la investigación, que se publicaron durante los últimos días de junio en El Heraldo de Madrid.

“El drama de Lorca es fiel a los hechos, pero los detalles imaginados crean una atmósfera de fatalidad y permite que una pasión campesina trivial se transfigure en una fuerza mitológica”, escribió muchos años después el periodista Tomás Eloy Martínez. En ese sentido, la modificación más radical fue la muerte del novio; Lorca instala en Bodas de sangre la idea de un conflicto ancestral entre las familias del novio y de la amante, y lanza a los dos bandos en busca de la novia desertora.