Los incendios forestales no dan tregua en varias provincias

De acuerdo al Servicio Nacional de Manejo del Fuego, hay focos activos en las provincias de Formosa, Misiones y Río Negro. En Corrientes, la sequía genera gran preocupación.

En el marco de uno de los veranos más calurosos registrados en la historia argentina, las provincias de Formosa, Misiones y Río Negro registran focos activos de incendios forestales. Por esa razón, en varias de esas zonas se trabaja con helicópteros y aviones hidrantes. Asimismo, Corrientes se encuentra bajo un alerta por calor extremo, una condición considerada agravante del complicado cuadro de incendios rurales por el que atraviesa la provincia, a la cual se le suma un déficit de lluvias que se extenderá hasta marzo.

De acuerdo al informe del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, los incendios en Formosa permanecían activos en Pilcomayo. En tanto, en Misiones, los incendios se registran en las localidades de Aristóbulo del Valle y Apóstoles, donde se desplegó un avión hidrante perteneciente al organismo. En Río Negro, hay incendios en el Complejo Lago Martín, en Bariloche, donde se desplegaron 154 brigadistas y personal de apoyo convocado por el SNMF y Parques Nacionales, junto al director nacional del SNMF, Alberto Seufferheld, y al coordinador Regional patagónico, Ariel Amthauer. A su vez, hay seis aviones y tres helicópteros que operan desde las bases de Bariloche y El Bolsón, junto a un camión de comunicaciones, dos embarcaciones, un retroexcavadora, una máquina cargadora y ocho móviles de apoyo.

Por otra parte, el organismo precisó que las llamas fueron “controladas” en Tolhuin (Tierra de Fuego), en Pueyrredón y Belgrano (San Luis); Ituzaingó y Santo Tomé I (Corrientes); y Sobremonte (Córdoba). Por otro lado, en Junín (San Luis), Santo Tomé II (Corrientes), Independencia (Córdoba), Aluminé (Neuquén), y Anta (Salta); los incendios fueron “contenidos”. Por último, el SNMF informó que están “extinguidos” en Ledesma (Jujuy), en Valle Viejo (Catamarca), y en Tapenagá (Chaco).

Corrientes, por su parte, se encuentra bajo alerta rojo por las temperaturas en el norte de la provincia. Si bien los focos registrados en las últimas semanas fueron contenidos, el calor extremo y las sequías generan una profunda preocupación en las autoridades alrededor de la reactivación de los fuegos. Hasta el miércoles próximo, señala el Servicio Meteorológico Nacional, están pronosticadas temperaturas máximas de entre 37 y 40 grados en esa zona.“Como ejemplo del impacto de los incendios en Corrientes podemos mencionar que en 19 días de enero el cuartel de bomberos voluntarios de Paso de la Patria debió atender 200 servicios, y si consideramos que en la provincia hay 48 cuarteles, la situación es una locura”, dijo Bruno Lovinson, subdirector de Defensa Civil de Corrientes. “El principal factor de los focos ígneos rurales es la acción humana. El 95% de los incendios son intencionales, principalmente por las quemas de basuras y de pasturas, como si prendiendo fuego en los campos productivos luego creciera mejor pasto. No es así, la pastura es de mala calidad por la sequía continuada que sufrimos”.

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