Realizan un gran hallazgo en la Manzana de las Luces
Aparecieron construcciones sanitarias, restos de vajillas y objetos de un gran valor histórico.
En medio de la renovación del casco histórico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los trabajadores se toparon con un descubrimiento sorprendente. En uno de los patios de la Manzana de las Luces, en donde se estaba reemplazando el piso para abrir una rejilla perimetral de desagüe de agua de lluvia, aparecieron construcciones sanitarias del siglo XVIII y XIX. Se trata de una cisterna de aljibe con un caño de plomo para la ventilación, un pozo ciego y una bóveda de quince metros de profundidad hacia donde iba el agua cuando funcionaba allí la Universidad, instalada en el edificio en 1821. En ese marco, se encontraron también restos de vajillas y otros objetos de gran valor.
Este edificio de 400 años de antigüedad y vecino del Cabildo estaba “con sus huesos a la vista” como consecuencia de la etapa de renovación histórica a la que estaba sometida. Cuando en uno de sus patios, ubicado a 200 metros de Plaza de Mayo, la historia volvió a sorprender al presente. Este trascendental descubrimiento arqueológico fue acompañado por cerámicas, algunas resquebrajadas y otras en óptimas condiciones al igual que distintos objetos de la época.
Aquella manzana, ubicada entre las calles Alsina, Moreno, Bolívar y Perú, que supo albergar instituciones como la Imprenta de Niños Expósitos, la Academia de Medicina y la Biblioteca Nacional y, como si fuera poco, a la Universidad de Buenos Aires —funcionó allí durante 150 años—, está nuevamente en el centro de la atención.
Según anticipó el equipo de arqueólogos y antropólogos del Ministerio de Cultura de la Nación, este hallazgo se abrirá al público dentro de un mes, cuando terminen las tareas de clasificación de los objetos como fragmentos de platos y vasijas, algunos de producción local y otros provenientes de Europa. Será una de las atracciones centrales.