Última cena solidaria: una iniciativa que se despide hasta el próximo invierno

El restaurante local que durante tres meses sirvió platos gratuitos a personas en situación de calle suspenderá la asistencia hasta 2018. Para ese año, además, proyectan construir un baño con ducha para quienes lo necesiten

Tenemos la certeza de que dimos todo cuanto pudimos a los que se acercaron”, dijo Gisella Peluso a diario Hoy. Las personas a las que se refiere concurrían todos los miércoles a la noche al Bar Expreso, ubicado en 12 y 71, donde les daban de cenar sin pagar nada. 

Fue en principio una idea solidaria que salió de su pequeño hijo Pedro, quien, viendo la necesidad de un hombre en situación de calle, lo invitó a comer al bar de su papá. La idea se hizo grande, se concretó a fines de junio y duró todo el invierno e incluso en las cálidas jornadas de septiembre y octubre, llegando a alimentar entre 55 y 65 bocas promedio por semana. Pero el aumento en el alquiler hizo imposible mantener la gratuidad de las cenas, y el miércoles que viene darán la última.

“Nos apena, porque sabemos la importancia que tiene para la gente que solía venir, pero queremos darles de comer dignamente y no podemos solventarlo”, afirmó la dueña del lugar. 

Sin embargo, la suspensión de la ayuda es temporal, ya que El Expreso no ha frenado su cruzada solidaria. Todo lo contrario: la apuesta se redobla el invierno que viene, ya que piensan construir un baño con ducha de agua caliente para aquellos que lo necesiten.

“Notamos que muchos de los que venían a comer no tenían siquiera donde lavarse las manos, y mucho menos donde bañarse, por eso queremos adicionar esta posibilidad”, contó Gisella.

La pequeña empresa familiar es la fuente de sustento de los Sessa, por lo que para desarrollar una actividad solidaria necesitaron pedir ayuda. “Muchos proveedores y vecinos colaboraron con productos, donándonos materia prima para cocinar”, comentó Peluso. 

Lo más difícil para la familia y el grupo humano que trabaja en el bar fue comunicárselo a las personas en situación de calle que concurrían cada miércoles. “Ellos, sin embargo, no hicieron más que agradecernos, ellos entienden que vamos a reversionarlo en 2018”, concluyó la mujer. 

Este bar solidario abre de miércoles a sábados de 19 en adelante. Todo aquel que esté interesado en colaborar con la causa puede hacerlo de una forma muy sencilla: yendo.