Al menos 16 muertos por los enfrentamientos entre Tailandia y Camboya
En el segundo día de combates, más de 140 mil personas debieron abandonar sus hogares. Intervención de Malasia para poder llegar a un alto al fuego.
Al menos 16 personas murieron en el segundo día consecutivo de enfrentamientos armados entre Tailandia y Camboya, según informaron ayer las autoridades de ambos países.
A su vez, el ministro tailandés del Interior, Phumtham Wechayachai, indicó que al menos 138.000 civiles habían huido de aldeas a refugios temporales en cuatro provincias fronterizas afectadas, mientras que las autoridades camboyanas reportaron que más de 4.000 personas evacuaron zonas próximas a la frontera.
Los combates, que comenzaron el jueves, continuaron en las últimas horas en al menos seis puntos distintos a lo largo de la frontera disputada, según el ejército tailandés.
Asimismo, Wechayachai, advirtió que la situación “se ha intensificado y podría desembocar en una guerra”, aunque por el momento permanece contenida en la franja limítrofe.
En tanto, los gobiernos de Tailandia y Camboya consideraron ayer un alto el fuego propuesto por Malasia, mientras los Ejércitos de ambos países continuaban su enfrentamiento por segundo día en varios puntos de la frontera.
El primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, país que alberga este año la presidencia rotatoria de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), conversó con sus homólogos tailandés, Phumtham Wechayachai, y camboyano, Hun Manet.
“Malasia apeló directamente a ambos líderes para un alto el fuego inmediato que evite nuevas hostilidades y genere un espacio para el diálogo pacífico y la resolución diplomática. Agradezco las señales positivas y la disposición mostradas tanto por Bangkok como por Nom Pen”, dijo Anwar en X.
La Unión Europea y China también se mostraron muy preocupadas
“Este problema tiene sus raíces en las secuelas de los colonizadores occidentales y debe ahora abordarse con calma y de manera adecuada”, declaró ayer el ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, en un comunicado.
Tras casi dos meses de tensión, el enfrentamiento entre los Ejércitos de ambos países explotó en la mañana del jueves. Ambos se acusan al otro de iniciar la contienda.
