Alemania tiembla ante la falta de gas ruso

Hasta el ataque de Rusia a Ucrania el 24 de febrero, el 55% del gas consumido en Alemania era de origen ruso. Desde ese día intentaron reducir este número y encontrar proveedores alternativos. En medio de esta búsqueda, el gasoducto NordStream1 que envía gas ruso a Alemania se ha cerrado por tareas de mantenimiento.

Desde marzo que los alemanes realizan acuerdos con otras naciones por sus necesidades energéticas. Al realizar acuerdos con Países Bajos y Noruega, entre otros, ha disminuido su uso de gas ruso a un 35% del total nacional. A su vez, Rusia ha bajado el flujo de gas que envía a los alemanes y a toda Europa en general. Por otro lado, los germanos también se preparan para poder recibir en sus puertos gas licuado procedente de Qatar, lo que implica una gran inversión en infraestructura. 

La primera alerta de precaución por faltantes de gas está activa desde finales de marzo. Ya en finales de junio el segundo nivel fue alcanzado debido al descenso en el flujo de gas proveniente de Rusia. A partir de este punto las recomendaciones del gobierno a los ciudadanos y el apoyo a las empresas se vio incrementado.