Alerta por la crisis energética en Reino Unido y su impacto social

El Reino Unido, uno de los países más poderosos de Europa, entró en una crisis energética de la que le será complejo salir y esto deriva en una crisis social, ya que hay millones de personas que aseguran no poder hacer frente a los costos de electricidad y gas en el invierno que se avecina.

Esto derivó en una serie de protestas en las que organizaciones y personas autoconvocadas reclamaron la baja de las tarifas, algo que el gobierno parece no estar dispuesto a hacer. Así, los británicos destinarán unos 600 euros (505 libras esterlinas) al pago de las boletas.

El problema es que una persona con un ingreso medio recibe unos 22.000 euros al año (poco más de 18.500 libras), por lo que el pago de la energía se llevaría buena parte de su salario, y complicaría la organización de su vida.

Según las cifras oficiales replicadas por un informe español, hay actualmente 14,5 millones de británicos que son pobres y muchos ya prevén recurrir a la comida de iglesias o centros comunitarios para poder pasar las noches en un lugar calefaccionado. Por eso, se lanzó una campaña que convoca a no pagar a las compañías de gas y electricidad como método de protesta, que ya tuvo miles de adhesiones.

En el marco de la emergencia el ex primer ministro laborista Gordon Brown, propuso que se avance en la nacionalización temporal de las energéticas, pero primero imponer un tope a las tarifas, dar ayudas a los usuarios y aumentar la capacidad de almacenamiento de gas.

Por su parte, el gobierno -que vive una crisis política desde el anuncio de la renuncia de Boris Jonhson- dijo que se otorgará ayuda de 420 libras por hogar y del doble para los más necesitados; pero descartaron que vaya a haber nacionalizaciones de compañías.

A su turno, el exministro de Economía Rishi Sunak, propuso suspender el IVA y las tasas al gas y la electricidad, y que el Estado asuma la deuda de quienes no puedan pagar. En tanto que los liberales demócratas propusieron congelar los precios a su nivel actual.

Así funciona el sistema energético en Reino Unido

Según un informe español, cada seis meses el regulador de la energía establece la cantidad máxima que las compañías de gas y electricidad que operan en el Reino Unido pueden cargar a sus clientes con una tarifa fija, teniendo en cuenta elementos como la oferta, los precios del combustible, los costes operativos y del transporte, los impuestos aplicables, etcétera.

Hace algunos meses, ese monto fue elevado a 2.200 euros anuales para un consumo de energía medio, pero se prevé que en octubre, como consecuencia de la guerra de Ucrania y Rusia, además de factores externos, aumentará a alrededor de 5.000 euros, y en el invierno sobrepasará los 7.000, en tanto que otros usuarios pagan una tarifa variable.