Espionaje en España: declaran la causa secreta y el presidente Sánchez se puede presentar como damnificado
Tanto el presidente como su ministra de Defensa habrían sido espiados con Pegasus.
El juez de la Audiencia Nacional española José Luis Calama decretó el secreto por un mes de la causa abierta por el presunto espionaje al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a la ministra de Defensa, Margarita Robles, a través de sus teléfonos celulares mediante el software Pegasus, y les ofreció a ambos presentarse como damnificados, en línea con lo solicitado por la Fiscalía.
En una resolución adoptada hoy, el magistrado explicó que la declaración del secreto tiene por objeto "prevenir una situación que pueda comprometer de forma grave el resultado de la investigación", reseñó la agencia de noticias Europa Press.
La decisión, añadió Calama, busca "impedir que el conocimiento del resultado de las diligencias (...) pueda dar ocasión a interferencias o manipulaciones dirigidas a obstaculizar la investigación y frustrar sus objetivos".
Todo ello se debe a que en la investigación pueda surgir "la posible existencia de información sensible que puede estar legalmente clasificada" y llegue a "comprometer gravemente la seguridad del Estado o perjudicar los legítimos intereses de personas ajenas al procedimiento".
Al mismo tiempo, el instructor les ofreció a Sánchez y a Robles la posibilidad de presentarse en la causa como particulares damnificados.
No obstante, dado el carácter secreto que adquirió ahora la causa, solo el juez y el fiscal tendrán conocimiento de lo que se investigue durante este periodo procesal.
En cualquier caso, Calama recordó que el resultado de las diligencias que se practiquen durante este mes podrá ser conocido posteriormente, "evitando así cualquier merma del derecho de defensa, ya que una vez conseguida la efectividad con esta medida perseguida el levantamiento del secreto permitirá a las partes el ejercicio de defensa sin restricción de clase alguna".
A principios de esta semana el Gobierno español presentó una denuncia ante la justicia en la que asegura que los teléfonos celulares de Sánchez y Robles fueron objeto de escuchas "ilegales" y "externas" a través del programa informático israelí Pegasus, intromisión que permitió el robo de "gran cantidad de información".
De acuerdo con la denuncia presentada ante la Audiencia Nacional, las intrusiones se produjeron en mayo y junio de 2021, en el teléfono móvil de Sánchez, y en esta última fecha en el de Robles.
Los piratas informáticos extrajeron del teléfono del jefe del Gobierno una enorme cantidad de información: 2,6 gigas en la primera intrusión y 130 megabites en la segunda, mientras en el aparato de la titular de Defensa el robo fue menor: 9 megas.
El Gobierno desconoce cuál fue la información robada y su grado de sensibilidad, pero se trata, en ambos casos, de las líneas institucionales, no privadas.
Estas últimas novedades llegan en plena agitación política en España, donde el Gobierno de Sánchez lleva días en tensión con los independentistas catalanes, que acusan al CNI de haberlos espiado.
El caso explotó el 18 de abril, cuando Citizen Lab, un proyecto de ciberseguridad de la Universidad de Toronto, hizo público un informe que identificaba a más de 60 personas de la órbita independentista catalana que habrían tenido sus teléfonos móviles infectados entre 2017 y 2020 con el software Pegasus.
Entre los afectados por el espionaje denunciado hace dos semanas figuran el mismo Aragonés, por entonces vicepresidente regional; los expresidentes catalanes Quim Torra y Artur Mas; eurodiputados, diputados del Parlamento regional catalán y miembros de organizaciones civiles independentistas, según Citizen Lab.