Francia suspendió a 3.000 trabajadores de la salud por no vacunarse
Entró en vigencia la obligatoriedad de la inoculación para ese sector.
El gobierno de Emmanuel Macron aplicó rigurosas medidas sancionatorias a 3.000 trabajadores sanitarios no vacunados contra el coronavirus, a raíz de la entrada en vigencia de la obligatoriedad de inmunización para estos profesionales, según anunció el ministro de Sanidad, Olivier Véran.
Esta semana entró en vigencia la vacunación obligatoria contra el coronavirus para 2,7 millones de profesionales de la salud que trabajan en hospitales, residencias de ancianos, cuidados especiales, ayudantes a domicilio, bomberos y asistentes de ambulancia.
“Hubo unas 3.000 suspensiones que han sido notificadas al personal de centros de salud” por no haberse aplicado al menos una dosis de la vacuna, explicó Véran a la emisora de radio RTL y, además, informó que hubo “decenas de dimisiones”. Asimismo, el ministro subrayó que la continuidad de la atención sanitaria está asegurada y que un gran número de las suspensiones es temporal y concierne “esencialmente al personal de los servicios de apoyo”. En definitiva, la norma busca acelerar el ritmo de vacunación y establece que el personal médico que no justifique que ha recibido al menos una dosis de la vacuna, o que la misma le ha sido contraindicada, dejará de ejercer -de forma parcial- su profesión.