Corrupción S: dos exfuncionarios siguen prófugos y crece el escándalo

Están involucrados en las estafas que se habrían registrado en el Ministerio de Salud bonaerense. Uno de ellos es exsubsecretario de Adicciones, quien lanzó frases provocadoras por Twitter. La Justicia debe definir, por estas horas, si libera o confirma la detención de dos empresarios y otros dos funcionarios que fueron aprehendidos 

Hasta la madrugada de hoy, la Policía y la Justicia bonaerense no habían podido dar con los paraderos de quienes fueron las máximas autoridades de la Subsecretaría de Prevención de las Adicciones durante el gobierno sciolista: Carlos Sanguinetti y Viviana Calegui. Ambos están prófugos, acusados por estafas en la compra de insumos para el Ministerio de Salud bonaerense. Estas maniobras también estarían vinculadas con la llamada mafia de los medicamentos y con el robo de oncológicos de alto costo en el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA).

Lo curioso es que la cuenta de Twitter de Sanguinetti mostró actividad el pasado viernes, cuando la orden de detención, pedida por el fiscal de Delitos Complejos, Jorge Paolini, se había librado hacía más de 48 horas. 

“La lucha no es contra la gente que cree genuinamente, sino contra los poderes ocultos que desinforman y manipulan”, escribió Sanguinetti en una suerte de provocación, intentando echar culpas a los medios de comunicación, que no hicieron más que informar sobre los hechos por los cuales está prófugo de la Justicia.

Además de Sanguinetti y Calegui, también están involucrados otros exfuncionarios y empresarios farmacéuticos. En efecto, la semana pasada fueron apresados la exdirectora de Contabilidad del Ministerio de Salud, Beatriz Priolo, quien está alojada en la comisaría de Villa Elisa, y Hernán Azzarri, que se halla tras las rejas en la comisaría Cuarta, ubicada en el barrio de La Loma. En igual situación se encuentran los empresarios Leonardo Paci, preso en la comisaría de Tolosa, y Leandro Durand.

Durante las próximas horas, en los tribunales platenses se deberá decidir qué sucederá con todos los presos, quienes ya presentaron pedidos de excarcelación. Pero  todo indica que serían rechazados, teniendo en cuenta la carátula de los hechos imputados. 

Priolo, Paci, Durand y Azzarri fueron aprehendidos por efectivos de la DDI La Plata el miércoles pasado en Los Hornos, City Bell, Gonnet y Villa Elisa, respectivamente. Como el fiscal de la UFI Nº 8, Jorge Paolini, pidió las detenciones pero no ordenó allanamientos, los detectives tuvieron que esperar hasta sorprender a los sospechosos en la vía pública. Un vocero policial confirmó que “ninguno ofreció resistencia”.

Tal como reveló este medio en su edición del sábado, la estafa en el Ministerio de Salud estaría estrechamente conectada  con el robo de oncológicos en el IOMA, un caso que fue revelado por Hoy en exclusiva el 6 de diciembre de 2011. Todo comenzó cuando salió a la luz que un afiliado, que había fallecido de cáncer, aparecía en el sistema informático del IOMA con tratamientos activos. Además, estaban registrados pacientes con terapia oncológica a los cuales se les cargaban drogas que sus médicos nunca les habían indicado.

¿Irán por los “peces gordos”?

Ante el escándalo generado por las detenciones, en el ámbito de tribunales plantean interrogantes acerca de si, finalmente, la Justicia avanzará sobre los llamados “peces gordos” de la gestión sciolista.

Muchas sospechas generó el hecho de que la investigación penal, a cargo del fiscal de Delitos Complejos Jorge Paolini, no haya alcanzado, hasta el momento, a Daniel Pérez, el exsubsecretario de Administración del Ministerio de Salud, quien por estos días se encontraría en España. Ocurre que este funcionario era el superior jerárquico de Priolo. Avanzar sobre Pérez, a su vez, también podría significar que quede bajo la lupa judicial el exministro de Salud de Scioli, Alejandro Collia, quien actualmente se desempeña como secretario en la Municipalidad de La Matanza.

Cabe recordar que Paolini fue denunciado penalmente por la diputada Elisa Carrió. Lo acusó de estar vinculado estrechamente con el exministro de Justicia del sciolismo, Ricardo Casal. Según Lilita, por ese padrinazgo político no habría apelado el sobreseimiento dictado en tiempo récord por el juez Esteban Raele a favor del exgobernador, en una causa iniciada por supuesto enriquecimiento ilícito.

Asimismo, un hecho que llamó poderosamente la atención en tribunales fue que las órdenes de detención las firmó el polémico juez platense César Ricardo Melazo, a quien el jueves pasado se le inicio un jury. El magistrado está acusado de graves irregularidades que van desde haber liberado a una banda de cuatreros, que habría pagado coimas, hasta haberse metido indebidamente en el expediente que tramitaba en otro juzgado para dictarle el sobreseimiento a un dirigente sindical acusado de prender fuego un patrullero. Además, está en la mira por haber facilitado la fuga del exbarrabrava K, Marcelo Mallo.

El colmo es que Melazo, en el año 2013, favoreció de manera escandalosa con una excarcelación extraordinaria a uno de los empresarios farmacéuticos que ordenó volver a aprehender esta semana. Nos referimos a Leonardo Paci, quien también se encuentra seriamente involucrado por el affaire de los medicamentos. 

Hace tres años, la resolución que firmó el magistrado platense fue a pedido de los abogados defensores, en especial, según se informó, de su entrañable socio Fernando Burlando, quien también asiste a otro de los implicados en el affaire de los oncológicos: el exsubdirector de Farmacia y Bioquímica del IOMA, Marcelo Piergiácomi, un hombre estrechamente ligado a la conducción del gremio UPCN. 

A su vez, otro de los implicados en la causa del Ministerio de Salud, Carlos Sanguinetti, también estaría vinculado con otras organizaciones sindicales con representación en el área de salud.