El vínculo entre Massa y el fiscal acusado de proteger narcos

Crece el nerviosismo en el Frente Renovador por las acusaciones contra Novo

La decisión del procurador bonaerense de confirmar las imputaciones contra el suspendido fiscal general de San Isidro generó un fuerte impacto político. Desde la Coalición Cívica buscan ir a fondo

Luego de que el procurador bonaerense, Julio Conte Grand, confirmara la acusación en el proceso de juicio político que se le sigue al suspendido fiscal general de San Isidro, Julio Novo, un creciente nerviosismo está invadiendo al Frente Renovador que lidera Sergio Massa. El temor tiene su fundamento: la relación entre Novo y Massa fue y sigue siendo muy estrecha, e involucra aspectos extremadamente sensibles que van desde el presunto encubrimiento a narcotraficantes, algunos de los cuales estaban radicados en la zona de Nordelta, hasta circunstancias nunca aclaradas del sospechoso robo en la casa del ahora diputado nacional, ocurrido en el año 2013.  

En diálogo con diario Hoy, el diputado provincial Guillermo Castello (Coalición Cívica), uno de los principales referentes de Elisa Carrió en la Legislatura bonaerense, contó: “Nos parece sumamente importante la decisión del procurador general de la Suprema Corte de Justicia de confirmar las acusaciones contra el fiscal Novo en el marco del juicio político que se le sigue por el presunto encubrimiento de las actividades delictivas de un cartel”.

“La decisión del procurador confirma las denuncias y presentaciones judiciales que desde hace más de seis años impulsa la doctora Carrió”. Además, Castello destacó que esta nueva determinación de Conte Grand “va en línea con las exigencias de la ciudadanía de tener una Justicia más transparente y de la convicción de la gobernadora María Eugenia Vidal de combatir las mafias enquistadas en la Provincia”.

Desde hace años, Carrió viene denunciando las conexiones entre Massa, Novo y la presunta protección de narcotraficantes. De hecho, declaró como testigo en la causa que se sigue en el juzgado a cargo de Sandra Arroyo Salgado, que el año pasado derivó en el procesamiento del fiscal general de San Isidro por “encubrimiento agravado”. La resolución alcanzó también a los fiscales adjuntos, también suspendidos, Rodrigo Caro y Eduardo Vaiani, y sus secretarias, Mariana Busse y Melisa Rey.

Asimismo, el accionar de Novo habría sido central para que se terminara archivando la investigación por las presuntas irregularidades que se habrían registrado en la investigación por el robo ocurrido a los Massa en el año 2013. El primero en dar a conocer esta situación fue el fiscal Washington Palacios, durante su defensa realizada ante el Tribunal de Enjuiciamiento. Allí, dijo que tomó conocimiento, a través de dos agentes fiscales del Departamento Judicial de San Isidro (Andrés Zárate y Luis Angelini), que una persona llamada María José Basiglio fue “presionada” por el propio fiscal Claudio Scapolán, un integrante de la Fiscalía General de San Isidro (Rodrigo Caro) y un referente del Frente Renovador para que “declarara falsamente en mi contra en la investigación que llevó a cabo el propio Scapolán, y derivó en el pedido de enjuiciamiento”.

Scapolán, considerado el brazo ejecutor de Novo, estaba a cargo de la Fiscalía de Delitos Complejos de San Isidro e intervino en la investigación por las presuntas irregularidades en los allanamientos realizados tras el robo a la casa de los Massa. Entre otras anomalías, se habrían falsificado firmas en las actas policiales y se habrían sustraído sumas de dinero muy superiores a las declaradas. A su vez, en el procedimiento estuvo presente, de manera muy sospechosa, uno de los principales asesores de Massa: Diego Santillán. Producto de este escándalo, y tras una presentación de Elisa Carrió ante la Suprema Corte bonaerense, la fiscalía que tiene a su cargo Scapolán fue disuelta. 

“Lilita” denunció al ahora exfiscal de Delitos Complejos por “brindar protección y encubrir graves hechos delictivos”. Enumeró que “ha omitido practicar diligencias o instruir sumarios para comprobar la existencia de delitos, como así también incumplió su obligación de promover la persecución y represión de quienes cometen hechos delictivos” 

Según Carrió, “Scapolán formó una investigación por falso testimonio contra el testigo del procedimiento por el robo a la casa de Massa (César Jaunarena) y se negó sistemáticamente a practicar un peritaje caligráfico respecto a las firmas obrantes en el acta donde se documentaron los allanamientos, pese a que la defensa de Jaunarena aportó un peritaje de parte que acredita la falsificación de firmas en dicho instrumento público”.

Amigos son los amigos

Tan estrecha es la relación entre Massa y Novo que, la semana pasada, el exintendente de Tigre defendió públicamente al suspendido fiscal general, pese a las graves acusaciones que pesan en su contra.

El jueves pasado, ante una consulta del periodista Luis Gasulla en Canal 9, Massa dijo: “Tuve una relación de trabajo muy razonable, de mucho diálogo y muy franca con Novo. Cada vez que había un hecho delictivo a las 3 de la mañana, era uno de los pocos que atendía el teléfono”.

“Novo ha cometido delitos de toda clase”

El dirigente de Coalición Cívica, Héctor “Toty” Flores, de estrecha relación con Elisa Carrió, le dijo a este medio que “el avance contra aquellos jueces y fiscales que han sido protectores del progreso narco en la Argentina es algo bueno para la Justicia y el país. Ojalá ahora muchos otros se animen y se sancione como debe ser, de acuerdo a la ley, a toda esta gente que como Novo han cometido delitos de toda clase. La Argentina necesita un cambio profundo, y para ello se debe terminar la connivencia entre el delito, la Policía, la Justicia y el poder político”.

“La confirmación de la acusación en contra de Novo es un avance que sirve para reconciliar a la Justicia con la sociedad, y muestra que cuando se trabaja en conjunto en pos de un ideal, los corruptos y los cómplices del delito pueden terminar en la cárcel, que es el lugar donde merecen estar”, concluyó Flores.

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