En OFF // Quilmes: ¿Ruptura política en ciernes?
Cuentan en los pasillos del poder, que la relación entre el diputado provincial Fernando Pérez y el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, ya no es lo que era, y que son constantes los roces entre ambos, lo que llevaría al actual candidato a intendente de Quilmes a acercarse cada día más al PRO y a la figura de Mauricio Macri.
Fue el propio Pérez una de las personas que más bregó dentro del radicalismo para una alianza con el macrismo a nivel nacional, y a pesar de ser parte del partido de Posse, llamado Espacio Abierto, sigue considerándose radical y un hombre orgánico al centenario partido.
Hasta hace pocas semanas eran habituales los carteles por las calles quilmeñas donde se mostraba a un Pérez sonriente al lado de la figura de Posse y con el jefe de gobierno porteño detrás, cosa que ha cambiado en los últimos días cuando esos mismos carteles fueron cambiados sólo por los rostros del diputado y Macri, algo que habría caído muy mal dentro del possismo, que según dicen, habría considerado esta actitud como una “traición” hacia su persona.
Por su parte, quienes apoyan la candidatura a intendente de Pérez, sostienen que esto se debió a la indefinición de Posse, que mientras dice estar del lado del armado PRO-UCR en la provincia, se lo ve con Scioli, teniendo amenas charlas (ver página 7).
Panorama complicado al interior del possismo, con encuestas que no le dan los números para competir por el sillón de Dardo Rocha, y que lo lleva a tener discusiones con miembros de su grupo que amenazan aún más un espacio que ya de por sí es pequeño y con poca estructura partidaria a nivel provincial.
