Kim: pueblada contra la Municipalidad
Invadidos por la indignación e impotencia ante la desidia de los gobernantes, vecinos de la ciudad protagonizaron incidentes en la Municipalidad de La Plata.
Tras la conmoción que se vive en La Plata por el brutal asesinato de Kim Gómez, de tan solo 7 años de edad, vecinos y familiares marcharon hasta Plaza Moreno para exigir justicia.
La marcha comenzó pasadas las 17 y fue convocada través de redes sociales con el respaldo de la familia de Kim. Así, la movilización inició en las calles 28 y 84, desde donde se dirigieron hacia Plaza Moreno (ver página 14).
En los rostros de los presentes se vio reflejada la bronca, indignación y tristeza por la desgarradora y trágica manera de morir de la nena y por la falta de respuestas de un gobierno que parece estar más pendiente del embellecimiento de las plazas que de la seguridad de los vecinos.
Todas esas sensaciones se agigantaron cuando la marcha pasó por la zona de 25 y 72, lugar donde se produjo el primer momento del violento robo, donde los ladrones abordaron el Fiat Palio rojo en el que iban Kim y su madre.
“Pidamos justicia”, “Esto no puede quedar así” y “Ayudemos a esa madre que hoy lamenta los restos de una nena”, fueron algunas de las consignas que se escucharon durante la marcha que, a medida que avanzaba, iba sumando gente y fuerza.
Con un clima cargado de emociones, enojos y frustraciones, la tensión explotó en el acceso a la Municipalidad por calle 12, cuando una columna intentó ingresar por la fuerza al edificio. En ese momento el intendente dejó solos a los platenses: las puertas del Municipio se cerraron, y la violencia se desató con golpes de palos y rotura de vidrios.
Tras estos incidentes, la tensión se prolongó durante varios minutos y los manifestantes buscaron ingresar por cualquier vía al Palacio Municipal. En ese momento se violentaron algunas ventanas.
Antes de que la situación pasara a mayores, un grupo de vecinos logró que los manifestantes más enardecidos se detuvieran. Así, la situación comenzó a normalizarse sin que se requiera la intervención de la Policía en el hecho.
El pedido de justicia por Kim y el reclamo hacia el intendente Alak y el gobernador Kicillof en el lugar fue unánime y continuó después de algunos minutos, hasta que la columna volvió a emprender la marcha hacia la Gobernación.
Emotivo reclamo de los vecinos en las puertas de la Gobernación
Luego los incidentes ocurridos frente a la intendencia de La Plata, durante la marcha en apoyo a la familia de Kim, los manifestantes se dirigieron hacia la Gobernación. Allí se reunieron para reclamarle al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, mayores medidas de seguridad.
De esta forma, y para plasmar el pedido, los manifestantes comenzaron a pegar carteles y encender velas en reclamo de mayor seguridad y justicia para la familia de Kim.
A medida que los manifestantes llegaban al edificio de la Gobernación, los reclamos fueron tomando mayor fuerza. En este contexto los vecinos comenzaron con gritos e insultos hacia los funcionarios. “Hijos de puta”, “asesinos” y “qué se vayan todos” comenzaron a escucharse junto con cacerolas y las bocinas de los autos que circulaban por la zona y se sumaban al pedido de seguridad y justicia.
“Seguridad, a mí no me interesa una plaza linda donde no hay seguridad y matan a los chicos todos los días, es básico”, señaló una de las manifestantes ante la prensa.
“Pagar con la sangre de una criatura es demasiado, le están pidiendo demasiado al pueblo. Por eso digo basta”, afirmó una vecina de Kim y agregó: “Yo trabajo, no soy delincuente. Los platenses decimos basta, no queremos que sea Rosario. Hasta acá́”.
Cabe mencionar que la comunidad despidió a la pequeña con profundos mensajes de tristeza y reclamos de justicia. Una de los primeros mensajes en conocerse fue el Club Real Madrid, donde la nena practicaba gimnasia artística. “El club Real Infantil acompaña a la familia de Kim en este momento tan doloroso. Esperamos una pronta justicia”, escribieron desde la institución.
“Que se haga justicia por Kim y que les dé fuerza a sus papás”, fue otro de los mensajes que se sumó al de tantos más que reclamaban por mayor seguridad y pidiendo que el crimen de la chiquita no quede impune.
Así, en un día cargado de emociones, los vecinos de la Plata despidieron a una criatura de 7 años, víctima de la inseguridad y de gobernantes que nunca estuvieron a la altura de lo que esta sociedad se merece: vivir mejor.