La única verdad es la realidad

Nuevamente el gobierno de Milei, a través del ministerio de Capital Humano, utiliza cifras amañadas con el objeto de deslegitimar los reclamos de las y los trabajadores universitarios y al mismo tiempo confundir a la población, disfrazando la crisis en la que ha sumido a la sociedad argentina.

Parafraseando el comunicado de ese ministerio, la realidad es que de diciembre a julio el aumento del sueldo del personal de las universidades nacionales fue del 68,6%, aunque omite maliciosamente mencionar que en el mismo período, el costo de la vida medida con el índice de precios al consumidor fue de 126,4%, evidenciando una pérdida salarial superior al 55%.

Pero también omite decir, que tanto el aumento del 6% correspondiente al mes de diciembre como una gran parte del que computa para el mes de febrero, ya habían sido negociados en la paritaria de noviembre de 2023 con el anterior gobierno. Esto es, el tan cacareado aumento que se arrogan, apenas supera el 50%.

“Los salarios de docentes y no docentes han sufrido, desde el mes de diciembre a hoy, la pérdida de más del 40% de su poder adquisitivo, convirtiéndose, de esta manera, en el mayor ajuste de toda su historia”, sostuvo Jorge Anró, Secretario Adjunto de la Federación Argentina del Trabajador de las Universidades Nacionales. Y agregó: “El desfinanciamiento de la educación universitaria ha sufrido este año el pico más alto del que se tenga memoria. Y así lo demostraron las masivas marchas para enfrentarlo. Trabajadoras y trabajadores continuarán con el plan de lucha hasta recibir la recomposición que les corresponde”.

Resulta lamentable que los trabajadores y las trabajadoras de las universidades nacionales sumen, a la constante humillación a la que son sometidos con una pantomima de paritaria en la que no se consensua absolutamente nada, sino que por el contrario el gobierno utiliza para comunicar unilateralmente los aumentos salariales, este nuevo despropósito de mentir descaradamente acerca de los aumentos otorgados.

No es de esta forma que se construye una relación madura con las Organizaciones Sindicales, por lo que sería de sana administración rever la política que el gobierno se ha dado para con quienes, históricamente, en un marco de racionalidad, han demostrado un genuino interés en la defensa de una universidad de excelencia, pública, inclusiva y cogobernada.

“Con vocación de diálogo, pero también con la firmeza y la convicción de siempre, llamamos a la reflexión a la Ministra Petovello y reafirmamos lo que hemos dicho a lo largo de todo este conflicto: sin salarios dignos las universidades no funcionan”, enfatizó Anró.