Más empresas entran en crisis
Trabajadores de Molinos Río de la Plata denunciaron despidos.
Los trabajadores de Molinos Río de la Plata, la firma de la familia Pérez-Companc comenzaron un paro indefinido luego que se conoció el despido de al menos diez trabajadores.
Las cesantías se dieron antes de la cuarta audiencia convocada por el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires ante la denuncia realizada de que había en marcha un proceso de despidos planificado. Los trabajadores esbozaron que este proceso de despidos comenzó el 26 de mayo y fue dejando a la planta con dotaciones de trabajadores que están por debajo de la cantidad mínima en cada una de las máquinas, lo que genera situaciones de riesgo para la salud de los operarios.
En paralelo, se confirmó el default de la empresa petrolera Aconcagua Energía, en el día que tenía que pagar intereses de su deuda. La firma contrató a la misma empresa que Celulosa para que elabore un plan de reestructuración de los pasivos.
Desde comienzos de mayo, el mercado había empezado a mostrar señales de desconfianza. Los títulos de deuda comenzaron a cotizar por debajo del 50% de su valor, con inversores que adelantaron problemas de liquidez tras la caída del crudo internacional.
La petrolera quiso emitir deuda por 250 millones de dólares en el mercado de Nueva York, pero debió cancelar la operación ante las condiciones imposibles: los bancos pedían tasas de más del 12% anual, muy de lo previsto por la compañía.