Cargó contra "La Morsa" Fernández y Falbo
Pesada denuncia de Carrió contra las mafias bonaerenses
La diputada nacional de la Coalición Cívica volvió a cargar ayer contra Aníbal “La Morsa” Fernández, al que quiere ver preso. Lo hizo en Quilmes, de donde es oriunda la Procuradora María del Carmen Falbo, a la que también denunció por proteger a narcotraficantes
La diputada nacional por la CC-ARI Elisa Carrió volvió ayer a la carga contra Aníbal “La Morsa” Fernández, al que dijo que quiere ver preso, luego de advertir que está "empezando" a enfrentarse a las "grandes mafias de la provincia de Buenos Aires" y aseveró que habrá una "limpieza de la corrupción".
Anteanoche había apuntado contra la Procuradora General de la Corte, María del Carmen Falbo, los fiscales corruptos y los integrantes de la Policía de la provincia de Buenos Aires que encabezan peligrosos negociados, entre los que mencionó al exjefe de la fuerza, Hugo Matzkin, de fuertes vínculos con el actual titular de la Bonaerense, Pablo Bressi.
Según Carrió, la gobernadora María Eugenia Vidal debería “ir por Falbo y todos los fiscales que tranzan con las mafias y el narcotráfico, que hicieron que se convirtiera a la provincia de Buenos Aires en un terreno fértil para los manejos del poder narco”.
Aníbal Fernández está acusado de ser el autor ideológico del triple crimen de General Rodríguez, con el objetivo de quedarse con el negocio de la efedrina, y Falbo por proteger al entonces fiscal general de San Isidro, Julio Novo, quien fue desplazado del cargo e imputado penalmente por encubrimiento agravado, narcotráfico, corrupción estructural y gravedad institucional.
Es que Novo y cuatro colaboradores habrían favorecido a una red narco internacional relacionada con los hermanos Gustavo y Eduardo Juliá, en el caso denominado narcojet, con conexiones en España y por los crímenes de colombianos en el shopping Unicenter, ocurridos en 2009.
En lo que se pudo entrever como una crítica hacia la propia administración de Cambiemos en terreno bonaerense, Carrió sostuvo que “estoy enfrentándome a las mayores mafias de la provincia de Buenos Aires. Nadie se anima a hacer esto, a ir a fondo contra las mafias que buscan gobernar a la sociedad”.
Falbo, de estrechos lazos con el exjefe de gabinete K, Fernández, es una funcionaria múltiplemente denunciada por sus manejos en la función pública. Las imputaciones contra ella van desde complicidad y encubrimiento con fiscales a su cargo acusados de graves delitos; hasta el de incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Recaudaciones millonarias tentadoras
En el mismo sentido, nuestro diario ha informado las denuncias judiciales que pesan sobre el actual número 1 de la Policía Bonaerense, Bressi. La justicia federal lo tiene en la mira bajo sospecha de encabezar una banda cuando se desempeñaba como director general de Drogas Ilícitas, donde habría recibido dinero todos los lunes de los 18 jefes de las delegaciones de esa área y que tendría como origen el cobro de un canon a los narcotraficantes a cambio de liberar las zonas para que vendan estupefacientes.
Justamente Bressi fue designado en febrero de 2012, en pleno apogeo de poder de Aníbal Fernández en el gobierno kirchnerista como titular de la delegación de Drogas Ilícitas de Quilmes. Luego, a pesar de que la proliferación de narcotraficantes no paraba de crecer, fue ascendido el último día de 2014 como encargado de todas las delegaciones antidrogas de la Provincia.
Todo parece indicar que Carrió advirtió que Vidal ha permitido que los grupos mafiosos sigan impunes en el territorio bonaerense y asumió el rol de denunciarlos, al percibir que la palabra cambio, para la gobernadora se escribe con K.
Un circuito que sigue intacto
El ministerio de Seguridad, al mando de Cristian Ritondo, nada ha hecho para cambiar la preocupante realidad de pactos con mafias de narcotraficantes, y designó en el lugar de Bressi en la Dirección General de Drogas Ilícitas a Claudio Fuentes.
Este jefe policial también está denunciado en la justicia federal por el presunto delito de haber sido “valijero” de Bressi, es decir, recaudaba plata sucia para el actual Jefe de la Bonaerense.
Hay varias denuncias de que la recaudación ilegal policial alcanza cifras millonarias al mes y que ese dinero (estamos hablando de casi 100 millones de pesos), llegan a las autoridades políticas, lo que explicaría el mantenimiento del “statu quo”.
Como se detalló en reiteradas ocasiones desde este diario, en base a detalles brindados por el Sindicato de la Provincia de Buenos Aires (SIPOBA) y de varios agentes que prefirieron el anonimato por su seguridad, la Bonaerense nutre la recaudación ilegal del cobro de coimas por actividades relacionadas con el narcotráfico, el juego clandestino, los desarmaderos, la prostitución y por el manejo corrupto en el pago de cores y POLAD.
Inseguridad sin freno, corrupción que mata
Mientras la gobernadora María Eugenia Vidal mantiene la misma estructura policial con solo algunos cambios de nombres, la inseguridad en el territorio bonaerense luce desenfrenada.
Entraderas mortales, secuestros extorsivos, asesinatos relacionados con el negocio de las drogas son moneda corriente. Es que todo indicaría que los jefes policiales con anuencia de los políticos están más preocupados en recaudar “plata sucia” en lugar de elaborar planes de seguridad para combatir al crimen organizado.
Rehenes de esta situación están los bonaerenses y la mayoría de los integrantes de la Policía, los que quieren trabajar con honestidad y transparencia pero ni siquiera cuentan con chalecos antibalas, capacitación en el manejo de armas y de situaciones límites, y cobran salarios muy por debajo de lo que perciben, por ejemplo, los integrantes de la Metropolitana.
No es difícil de ver que la actividad de los narcos, de los desarmaderos, de la proliferación del juego clandestino y de “truchar” vigilancias no hace más que fomentar mayor inseguridad.