Presentaron proyecto para establecer un salario básico universal

Un grupo de diputados del Frente de Todos presentó ayer un proyecto para establecer un Salario Básico Universal (SBU) para los trabajadores de bajos ingresos, equivalente al costo de la canasta alimentaria.

La iniciativa fue redactada por tres legisladores pertenecientes a lo que se considera el “ala kirchnerista” del FdT y ligados al dirigente social Juan Grabois. Se trata de Itaí Hagman, Natalia Zaracho y Federico Fagioli. A ellos se sumó Leonardo Grosso, integrante del Movimiento Evita. Los cuatro diputados presentaron el texto en un acto realizado en el salón Delia Parodi del Congreso Nacional, acompañados por el presidente del bloque oficialista, Germán Martínez, y el mencionado Grabois.

En ese acto, Hagman explicó que la idea es “eliminar la indigencia y valorizar las tareas que el mercado laboral no valora”. Y recalcó que su implementación “no es inviable”, aunque reconoció que demandaría “un monto significativo” proveniente de las arcas del Estado.

La iniciativa contempla una “prestación monetaria mensual no contributiva y de alcance nacional” para trabajadores de bajos ingresos equivalente a la canasta alimentaria básica establecida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

En sus considerandos, el proyecto explicita que la motivación para establecer esta prestación es un fenómeno que ya se viene señalando desde el Gobierno y al que hizo referencia la vicepresidenta Cristina Fernández, días atrás, en el discurso que pronunció en el acto en que recibió un doctorado honoris causa por parte de la Universidad Nacional del Chaco Austral (Uncaus): el de los trabajadores pobres.

“Actualmente, el empleo no garantiza ingresos suficientes para la reproducción de la vida en sociedad, sobre todo en economías con estructuras productivas y ocupacionales heterogéneas, caracterizadas por altos niveles de precariedad, como la que existe en nuestro país”, reza el texto. “Aun con el privilegio de un trabajo con aguinaldo, obra social y todos los derechos laborales y gremiales, es posible permanecer bajo la línea de pobreza”, continúa.

Al menos en esta encarnación, sin embargo, el SBU no alcanzaría a los trabajadores registrados. El universo al que está dirigido es el de los desocupados, trabajadores informales, monotributistas de la categoría más baja e inscriptos en el Régimen de Inclusión Social y Promoción del Trabajo Independiente.

Martínez, cercano al presidente Alberto Fernández y reemplazante del anterior presidente del FdT, Máximo Kirchner, procuró desactivar la lectura que ayer hacían medios opositores al Gobierno: que el proyecto sería una ofensiva contra el ala “albertista” y las políticas económicas en curso. “Por más que traten de encasillarnos, somos todos integrantes del FdT: venimos con trayectorias diferentes pero es importante que cada uno pueda hacer su aporte y escucharnos respetuosamente. Bienvenido sea el debate para aspirar a tener una Argentina más inclusiva”, dijo. Y destacó que la iniciativa se inscribe en las ideas del Presidente “sobre la producción y el trabajo”.