Continúa el misterio en el crimen de Berisso

La Policía busca al autor del brutal homicidio de José Cravero, ultimado a golpes en su casa de 71 y 122 bis. Según los investigadores “lo atacaron con un objeto contundente” y no se robaron nada.

Vecinos del barrio de Villa Arguello de Berisso no salen aún de su conmoción luego del sangriento crimen de un chapista, identificado como José Cravero (65), que fue asesinado a golpes en su casa de 71 y 122 bis. Según voceros, el lugar “estaba todo revuelto y había signos de pelea”.

“Tenía golpes por todos lados, pero principalmente contusiones en la cabeza. Le han pegado con un hierro o caño”, aseveró una fuente consultada. A su vez, agregó que “por el momento no hallaron arma homicida”. Cabe mencionar que los mismos pesquisas afirmaron que en la vivienda no había faltantes, por lo que el móvil de robo quedó prácticamente descartado. “No había violencia sobre los ingresos al domicilio”, concluyó el investigador.

Como bien informó este multimedio en su edición anterior, todo comenzó cuando un vecino avisó a la expareja de la víctima que no sabían nada de él desde hacía cuatro días, por lo que ella decidió acercarse hasta el inmueble para verificar que todo estuviera en orden. Sin embargo, cuando observó por la ventana vio al hombre tirado en el suelo y un gran charco de sangre, por lo que dio aviso a la Policía.

Según trascendió, un dato no menor es que el damnificado solía comprar cosas que habían sido robadas y que se encargaba de reducir. Tomó intervención la UFI nº 11, que caratuló la causa como “homicidio”, e investiga la DDI La Plata.

Una cifra en aumento

El crimen de Cravero fue el número 54 en la región en todo lo que va del 2020. Si bien en el 72% de los casos se logró detener a los responsables, lo cierto es que la cifra va en aumento y están cerca de duplicarse los casos que hubo en todo 2019.

El último incidente había sido el parricidio de Los Hornos: un joven de 24 años asesinó a su padre de 84 años en su casa de 67 y 134. Si bien en un principio habían caratulado el hecho como “averiguación de causales de muerte”, tras la autopsia descubrieron heridas defensivas, lo que terminó de convencer a la Policía de que se trataba de un homicidio.

Luego de tareas investigativas, el sospechoso fue detenido y terminó reconociendo que había matado a su padre durante una fuerte discusión que habían mantenido por motivos familiares.

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