Delincuentes armados asaltaron a un fiscal en la puerta de su casa de City Bell

El letrado fue abordado por cuatro ladrones que, a punta de pistola, le exigieron que les entregara su vehículo, con el cual se dieron a la fuga.

En nuestra ciudad no se salva nadie de los episodios de inseguridad y uno de los lugares más candentes es la zona Norte. Allí, en las últimas horas se registró un asalto en el que un fiscal fue abordado por delincuentes armados que le exigieron que les entregara su vehículo. Con el rodado, los maleantes se dieron a la fuga y hasta el momento poco se sabe sobre ellos.

De acuerdo a lo informado por las fuentes policiales, todo sucedió durante la noche, cuando el letrado que cumple funciones en Quilmes fue interceptado por cuatro sujetos cuando llegaba a su casa de la localidad de City Bell, ubicada en las calles 446 y 137. En ese preciso instante, se encontraba a punto de ingresar a su domicilio, cuando los ladrones lo sorprendieron y todo se transformó en una pesadilla.

Los malvivientes lo acorralaron y a punta de pistola lo obligaron a entregar las llaves de su automóvil, marca Mercedes Benz de color negro. Además, le arrebataron otras pertenencias como su teléfono celular y la billetera, en la que además de documentación personal, tenía algo de dinero en efectivo, cuya suma total no trascendió.

Tras ello, los individuos se subieron al coche de lujo y escaparon a toda velocidad, perdiéndose entre las calles del barrio. Sin perder tiempo, el damnificado se comunicó con el servicio de emergencias 911 y fue él mismo el que realizó la denuncia correspondiente, con el objetivo de que los efectivos policiales pudieran encontrar a los sospechosos en los alrededores.

Buscan a los delincuentes

Pronto se montó un operativo cerrojo en las inmediaciones, para que los delincuentes no escapen de la ciudad. Sin embargo, el vehículo del fiscal fue encontrado abandonado a las pocas cuadras del lugar en el que ocurrió el atraco, pero sin rastros de los sujetos. Por tal motivo, se presume que quizás podrían haber cometido otro ilícito con el coche y por eso lo dejaron allí.

En cuanto a la víctima, más allá del mal trago que debió atravesar, resultó ileso y no presentaba ­ninguna herida. Por su parte, sobre los malvivientes, hasta el cierre de esta edición continuaban prófugos de la Justicia y poco se sabía sobre ellos, por lo que eran intensamente buscados.

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