San Isidro

“Llamé al 911 y me daba ocupado”

Así lo afirmó en diálogo con este medio Matías, hermano de Carolina Píparo. El domingo por la noche, el hombre sorprendió a un delincuente queriendo ingresar en su casa

Un delincuente intentó robar en la casa de Matías Píparo, hermano de Carolina Píparo, la mujer que en 2010 perdió el bebé que gestaba tras ser baleada en una salidera bancaria en La Plata y que hoy encabeza la nómina de la Octava Sección Electoral como candidata a diputada provincial por Cambiemos.

El hecho ocurrió el pasado domingo por la noche, cuando el hombre sorprendió a un individuo queriendo violentar una ventana de su vivienda, ubicada en la localidad bonaerense de San Isidro. “Yo estaba arriba durmiendo a mi nena y escuché ruidos abajo. Cuando corrí la cortina vi a un tipo queriendo abrir la ventana. Le tiré un golpe al vidrio y salió corriendo”, relató Matías en exclusiva a este medio.

“No puedo seguir agradeciendo que no me haya pasado nada. Lo que tengo me lo gané trabajando y la verdad es que vivo con miedo. Tengo una hija de siete años y a mi mujer, ¿qué pasaba si entraban en mi casa? Además, a mi familia ya le ocurrió algo así y la pasó muy feo”, aseguró el damnificado en referencia a la salidera que sufrió su hermana hace siete años.

Por otro lado, se mostró molesto por la falta de seguridad: “Llamé al 911 y me daba ocupado, solo me atendió una máquina que me decía todos nuestros operadores están ocupados. Parecía que estuviera llamando a un banco para preguntar por una promoción. Llamé a la Policía porque tenía un tipo que quería entrar a mi casa y tuve que esperar a que uno se desocupara para que me atendiera”.

Además, aseguró que ya ha sufrido otros ilícitos: “Es la tercera vez que me pasa. Ya me robaron un auto a punta de pistola y en 2014, cuando estaba llegando a mi casa, me encontré con dos tipos armados que estaban adentro, aunque me pude escapar porque no llegué a estacionar y logré irme cuando me quisieron agarrar. Esa vez estaba con mi hija, mi cuñado y mi sobrina”.

“¿Cuánto falta para que me den un tiro?, a este paso muy poco, porque es una lotería”, relató molesto el damnificado y volvió a remarcar la deficiencia que tuvo como respuesta ante el hecho de inseguridad que padeció. “Tenemos alarma en la casa e inmediatamente toqué el botón antipánico, pero no respondieron y nunca se presentó nadie. La verdad, todo mal”, finalizó.

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