Monstruos de la misma calaña

Con muchas más similitudes que una foto, Cristian Martínez Poch y Néstor Monzón fueron los autores de sucesos aberrantes que quedarán en la historia de nuestra ciudad. Uno fue condenado y el otro espera el accionar de la Justicia

Numerosos hechos de abuso, engaños para seducir a sus víctimas y uso de drogas y alcohol, son algunas de las coincidencias entre dos hombres que son considerados bestias: el disc-jockey, Cristian Martínez Poch (51), y el fisicoculturista de Barrio Norte, Néstor Monzón (50). 

El modus operandi podría develar una conducta de imitación, la cual implica una observación y un aprendizaje social que detonan en una conducta agresiva.

El Conde

La violencia física, moral y psicológica que Martínez Poch empleó con sus hijas y Vanesa Rial, su exnovia, se reflejó en los escalofriantes testimonios que brindaron las tres mujeres durante el juicio que comenzó el 1º de agosto del corriente, duró un mes y culminó con una condena de 37 años de prisión para el imputado, quien fue acusado de abusar de sus dos hijas cuando eran niñas y de encerrar, golpear y violar a quien fue su novia durante septiembre de 2013.

Las hijas del acusado, hoy de 19 y 20 años, quedaron al cuidado de su padre al morir la madre de ellas y, a partir de ese momento, según declararon ambas, Martínez Poch las esclavizó, las obligó a ver películas pornográficas y presenciar sus actos sexuales con otras mujeres; además de realizarles tocamientos en sus partes íntimas con su pene.

En el caso de Rial, el hombre la sedujo con una imagen de “príncipe azul”, evidenciando inteligencia y amabilidad, para luego reducirla con narcóticos, golpearla y violarla, incluso permitiendo que al menos otra persona abuse de ella, mientras la mantuvo secuestrada en un departamento ubicado en 23 entre 58 y 59.

El 31 de agosto de este año, la fecha de la sentencia, Vanesa Rial declaró: “Es el día más feliz de mi vida, después de tres años”. Tras dar por superada una etapa, comentó que tiene planes de formar una familia, volver a ejercer su profesión de abogada a partir del año que viene y estar con sus amigos y padres.

El Monstruo de Barrio Norte  

Con muchas coincidencias, Néstor Monzón mantuvo cautivas, al menos, a dos mujeres que aún sufren las secuelas del reciente calvario. Una de ellas, de 45 años, fue secuestrada, golpeada y abusada sexualmente desde el 29 de octubre hasta el 3 de noviembre de este año, en un departamento de 36 entre 13 y 14. El propio acusado decidió “tirarla a la calle, como si fuera un objeto”, según un vocero judicial. 

Luego de que la afectada señaló a Monzón como el responsable de sus lesiones, el hombre fue aprehendido el lunes pasado en su vivienda de Barrio Norte. Se aguarda la segunda declaración de la damnificada frente a la Justicia, que será mañana. 

La mujer sufrió serias heridas a nivel genital, al punto que un pesquisa detalló que “de no haberse dado intervención a tiempo, la hemorragia podría haber derivado en el deceso de la damnificada”.

La segunda víctima es una mujer de 66 años con la que Monzón mantenía una relación amorosa y a quien también drogó, encerró y maltrató. Esto sucedió el viernes 4 de este mes, apenas un día después del fin del primer episodio. La última información que trascendió sobre Monzón es que permaneció unos días en la comisaría Decimocuarta y ahora se encuentra alojado con custodia policial en el Hospital Alejandro Korn de Melchor Romero luego de que “empezó a tener una serie de alucinaciones a raíz de la abstinencia de drogas y alcohol”, indicaron desde la fuerza.