Poliladrones: más comprometidos
El fiscal les agravó el delito al sargento y al oficial del Comando de Patrullas La Plata que robaron una moto previamente incautada. Ya fueron desafectados de la fuerza
El sargento de 34 años y el oficial de 22, aprehendidos en las últimas horas luego de haber sido acusados de quedarse con una moto que acababan de secuestrar en un operativo, continúan tras las rejas luego de haber declarado ayer en la fiscalía penal en turno, aseguraron fuentes judiciales.
Acusados de “hurto calificado por su condición de agentes de seguridad”, pasaron la noche del miércoles en los calabozos de la comisaría Primera y ayer lo hicieron en los de la Octava, luego de que Fernando Cartasegna les agravara el delito dejándolos formalmente detenidos.
Un jefe de la fuerza contó a Trama Urbana que “se les quitaron las armas reglamentarias y ya fueron desafectados de la Policía. A las 6 de la mañana (de ayer) llegó la notificación. Queremos repudiar el acto que cometieron y destacar que el personal de la fuerza no quiere a delincuentes entre sus filas”.
Como informó de manera exclusiva este diario en su edición anterior, los uniformados, pertenecientes al Comando de Patrullas, pararon el miércoles en 4 y 50 el andar de una moto Yamaha de 160 cilindradas, que era conducida por dos hombres.
“Aparentemente, los vieron sospechosos porque dieron varias vueltas por el mismo lugar”, dijo un jefe de la fuerza. El sargento y el oficial (el primero con varios años en la fuerza) incautaron el rodado, pese a que no había impedimento legal para que estuviera circulando.
Cuando los propietarios del vehículo lo fueron a buscar al Control Urbano, no lo encontraron. Fueron entonces a la dependencia Primera, con jurisdicción en la zona, pero allí tampoco estaba. Su tercer paso fue ir hasta el predio de la Policía Local, donde recibieron la misma respuesta, y se dirigieron al Comando. Allí, bajo las órdenes de Ricardo Astopini, se inició una investigación y se determinó quiénes habían sido los agentes involucrados en el hecho. Fueron hasta sus domicilios, y en el del sargento, ubicado en inmediaciones del centro, hallaron la moto.
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