Se entregó el responsable del atropello fatal en City Bell y dio su versión

Según le contó a este medio el abogado que va a patrocinarlo, el hombre dijo que “no sabía que había chocado a alguien”. Presentó un pedido de eximición de prisión y está en libertad

Cerca de las 16 de ayer, el hombre acusado de haber atropellado a cuatro jóvenes en City Bell, matando a uno de ellos y dejando a otro gravemente herido, se entregó por sus propios medios, aconsejado por un abogado. De este modo, ya se encuentra a disposición de la Justicia, aunque libre, ya que presentó un pedido de eximición de prisión. 

Como este medio informó en exclusiva en su edición anterior, el sujeto decidió ponerse a derecho y se apersonó en la comisaría Décima. Desde allí fue trasladado al Cuerpo Médico de la Segunda, donde le notificaron la causa. “Es un hombre de bien y se va a entregar”, le había dicho a Trama Urbana durante la noche del domingo un letrado que entró en contacto con el responsable, de nombre Edgardo, empleado de Tesorería de la Provincia, con domicilio en Villa Elisa. 

Marcelo Peña, quien defenderá al imputado a partir de que lea la causa, le contó a este medio que solo habló con él por teléfono e indicó qué fue lo que dijo: “Contó que venía manejando de noche, que no se veía nada y que de repente vio a un montón de gente en la calle. Los esquivó subiéndose a la vereda y ahí sintió un impacto. Frenó 20 metros más adelante, vio muchas personas que se acercaron para golpearlo, según creyó él, y entonces se fue”. 

A continuación, relató que “nunca se dio cuenta de que había atropellado a alguien y, cuando lo vio más tarde en internet, llamó a un estudio jurídico y decidió entregarse”. Por último, Peña repitió que el implicado “pensó que le iban a robar o a pegar, porque inclusive le rompieron el vidrio derecho de su camioneta”. 

Ahora, por orden de la Fiscalía nº 10, se llevó a cabo una orden de allanamiento en la casa del hombre, de 43 años, y se realizaron pericias sobre el rodado involucrado, para recolectar evidencias que aporten a la causa.  

Un hecho terrible 

El episodio tuvo lugar a las 4.30 del domingo en 446 entre 30 y 31, donde se estaba celebrando un cumpleaños dentro de una casa. En un momento, un grupo de amigos salió un rato a la vereda, y fue entonces cuando cuatro de ellos fueron atropellados por el conductor de un utilitario Renault Kangoo, quien después se dio a la fuga rumbo a Camino General Belgrano, sin asistir a las víctimas.

Uno de los atropellados, Marcos Albornoz (21), falleció prácticamente en el acto, mientras que los otros tres fueron trasladados a diferentes hospitales. Quien se encuentra más grave es Agustín Sánchez (19), que tras el fatídico hecho permanece alojado en el Hospital San Roque de Gonnet, en coma farmacológico. 

“Estábamos tomando aire y no esperábamos que un loco nos pasara por arriba”

Agustín Sánchez, el joven de 19 años que fue atropellado junto a tres amigos en City Bell durante la madrugada del domingo, continúa internado en grave estado. Se encuentra en coma farmacológico y en las últimas horas pasó por una nueva intervención quirúrgica, debido a una complicación en su cuadro. 

Su padre, Mariano, contó a este medio que el joven tuvo que volver a ser operado cerca de la medianoche del domingo debido a un sangrado constante en el estómago. “Salió bien, por suerte, pero ahora tiene mucha sangre en el cerebro, lo que hace que en su cráneo haya mucha compresión. Los médicos van a esperar por su evolución en ese sentido, de lo contrario, lo operarán una vez más”. 

Por su parte, quienes también se manifestaron ante este medio fueron los amigos de las víctimas, que exigieron justicia y pidieron que el conductor que causó la desgracia no sea liberado. “Agustín está luchándola y nosotros estamos metiéndole fuerza y haciendo lo que se puede. Vamos a estar con él hasta último momento”.

Sobre el incidente, manifestaron que estaban participando de un cumpleaños y “un grupo estaba afuera, en la vereda, tomando aire, porque hacía calor. Salimos a charlar entre amigos y no esperábamos que un loco nos pasara por arriba. El tipo nunca atinó a frenar. Yo estaba de espaldas y sentí un impacto. La camioneta apareció de la nada, en un segundo, y después vi a mis amigos tirados. Fue todo caos y gritos. Lo primero que hicimos fue ayudar a los chicos”.

Consumado el choque, en el que fueron arrollados cuatro jóvenes, el implicado escapó sin asistirlos. “Los chicos lo siguieron en la moto, tocaron bocina, pero nunca frenó. Queremos que se haga justicia, esto no puede quedar impune. No se puede hacer esto con la vida de nadie, no se justifica con nada. Nosotros estamos mal porque tenemos a un amigo que está luchando por su vida”, relató, consternado, uno de los allegados. 

Además, acerca de Agustín, relató: “Yo le decía que se levantara y nada. Tenía una gran hinchazón y no lo reconocía de tanta sangre”. Por último, aclaró: “Queremos desmentir a los que dijeron que poníamos ramas en la calle para obligar a frenar a los conductores y robarles. No pasó nada de todo eso”.