Un Policía liquidó a dos cacos que quisieron robarle en el marco de un terrible asalto
El oficial de la fuerza fue interceptado por dos delincuentes que intentaron robarle, produciéndose un sangriento tiroteo con resultado mortal.
Dos delincuentes fueron abatidos en las últimas horas por un oficial de la Policía Federal Argentina (PFA) tras un tiroteo generado cuando intentaron asaltarlo en momentos en que el uniformado llegaba a la casa de un amigo, informaron ayer fuentes oficiales.
El hecho se registró durante la tarde del miércoles en la esquina de las calles 140 y 26 de la localidad bonaerense de Berazategui, hasta donde se dirigieron los efectivos de la comisaría Primera, de esa jurisdicción, tras recibir un llamado al servicio de emergencias 911 que alertaba acerca de un enfrentamiento armado en el lugar.
Al llegar se entrevistaron con un sujeto que se desempeña en la División Servicios Audiovisuales de la PFA y que se encontraba de franco de servicio. De acuerdo a su relato, en el momento en el que había llegado a la vivienda de un allegado fue sorprendido por al menos cuatro individuos armados, que descendieron de un automóvil Volkswagen Trend de color gris.
Indicó que, como se resistió al asalto, se produjo un furibundo tiroteo que terminó pocos segundos después, cuando uno de los malvivientes quedó tirado en el piso al recibir un impacto de bala en la cabeza, que lo dejó malherido. Mientras tanto, sus cómplices se subieron al vehículo y escaparon rápidamente de la escena.
El agente, ileso
A su vez, a la vuelta de la esquina, a unos 40 metros del sitio donde se originó la balacera, fue encontrado otro de los delincuentes, tendido sobre el asfalto y sin vida.
En cuanto al estado de salud del caco que resultó herido y a quien se le secuestró una pistola calibre 9 milímetros, tuvo que ser trasladado de urgencia a un hospital de la zona, donde permaneció internado con muerte cerebral, hasta que ayer se confirmó también su deceso. En cuanto al agente de la fuerza, resultó ileso.
Tal como ocurre en estos casos, la escena del crimen fue preservada para realizar los peritajes correspondientes, mientras los investigadores analizan las cámaras de seguridad ubicadas en la zona y relevan el testimonio de testigos.
Por pronto, la UFI n° 1 de Berazategui intervino en la causa y ordenó secuestrar el arma del uniformado, para realizar el cotejo balístico, a su vez que no ordenó ninguna medida contra él.