Gas pimienta, requisas y demoras antes del festejo

Una vez más los hinchas de Estudiantes dieron una prueba de fidelidad llenando todos los sectores del estadio de Quilmes que estaban disponibles por la Aprevide. Tanto es así que más de quince miol personas dejaron de lado el soleado feriado del lunes y le rindieron honor al General San Martín poniéndole color al estadio Centenario alentando a los jóvenes albirrojos que ayer pusieron de rodillas al campeón del fútbol argentino. 

Desde muy temprano, las banderas típicas de diferentes barrios de La Plata se hicieron notar, destacando a La Loma, Gonnet, Altos de San Lorenzo o Berisso entre otros. 

Además, aparecieron trapos alusivos a la convocatoria de Santiago Ascacíbar a la Selección Argentina y la injerencia que siempre tuvo el club en el equipo nacional, ahora con la presencia de Lionel Scaloni en el banco de suplentes. 

En la previa, sin embargo, hubo dificultades para llegar a la cancha, ya que no fueron pocos los fanáticos que se contactaron a esta redacción para quejarse del operativo organizado por la Aprevide, que coordina Juan Manuel Lugones. 

En la zona de la subida de la autopista hubo requisas a los 21 colectivos que formaron parte de la movilización, aún cuando varias personas que viajaban eran mayores de edad y no tenían razones para transportar armas de fuego o droga. 

Además, en Quilmes fueron reprimidos con gas pimienta aquellos que no llevaban las ventanillas de los colectivos cerradas. 

Luego, en la cancha, el premio lo aportó el equipo y todos  terminaron festejando.