Gimnasia no supo cuidar todo lo bueno que había hecho y terminó encandilado con la luna de Avellaneda
A pesar de haber arrancado ganando con el gol de Alemán, cayó 3-1 con Racing y se fue al receso sumando su quinta derrota como visitante sobre siete partidos jugados en esa condición
Primer tiempo
En tiempos donde se empiezan a gastar los ahorros para planificar las vacaciones o los regalitos para el arbolito, Gimnasia demostró que es un equipo gastador. No supo cuidar los frutos que cosechó en los primeros minutos del partido y terminó perdiendo contra Racing en el último partido del año.
Un castigo demasiado cruel para un conjunto que pecó de inocente para defenderse, pero que mostró carácter y actitud para jugarle de igual a igual al rival.
En efecto, a los 2 minutos Brahian Alemán se apoyó en la complicidad de Faravelli para descolocar a la barrera en un tiro libre y clavar la pelota en el palo derecho del arquero Musso.
La definición dejó en evidencia que Mariano Soso también se aferra a las jugadas de pelota parada como estrategia para sorprender a los rivales, a pesar de que ayer no sirvió de mucho en el balance final.
Racing, que fue de menor a mayor, contestó con un cabezazo de Soto que salvó Martín Arias y el partido se tornó de ida y vuelta. Así, Gimnasia apostó a la presencia de Mazzola, quien guapeó y peleó contra los centrales y, de no ser por Musso, podría haber ampliado la diferencia para el Lobo a los 17 minutos.
Racing siguió buscando el empate, en la medida que se iban incrementando las dudas en el fondo de la Academia.
Tanto es así que a los 33, Lautaro Martínez superó a Oreja y sacó un cabezazo que se fue muy cerca del palo derecho de Alexis Martín Arias.
Esa jugada fue el anticipo de lo que luego llegaría a los 46. Cuando se terminaba la primera mitad, Lisandro López recibió el pase de Zaracho y definió empujando la pelota a la red casi abajo del arco.
Segundo tiempo
En la parte final, el partido arrancó abierto para los dos equipos. Racing sintió el desgaste por haber corrido desde atrás en el resultado durante todo el primer tiempo y Gimnasia, por la lesión de Alemán, quien sobre el final de la primera mitad se torció el tobillo.
En ese contexto, Dibble recibió muy solo por el costado derecho y, cuando ingresó al área para definir, optó por intentar cruzar la pelota, que terminó siendo rechazada por un defensor de Racing a los 5 minutos.
Siempre apelando al manejo de Ibargüen, Lautaro Martínez le ganó la posición a Licht y definió cruzado entrando en diagonal al área a los 16, como anticipo de lo que iba a ocurrir un minuto después, cuando desde afuera del área se las ingenió para sacar un disparo que se estrelló en el palo izquierdo de Arias.
La Academia fue inclinando la cancha a su favor, con mayor profundidad y determinación en el ataque.
Gimnasia respondió con una corrida de Alemán que llegó a posición de gol frente al arquero de Racing, y un disparo rasante de Oreja que contuvo Musso.
El tramo final del partido encontró a los dos equipos apostando al triunfo, pero Racing fue más audaz y, apoyado en la jerarquía de Licha López, terminó festejando: el experimentado atacante definió con tenacidad ante un centro al segundo palo, en el que Lucas Licht no opuso resistencia en la marca.
En el epílogo, Martínez decretó el resultado empujando la pelota al fondo de la red, luego de un penal que le había atajado el arquero Tripero.
En la tarde en la que Blanco fue reelecto, La Academia volvió a ver el horizonte celeste y se fue al receso con un triunfo que levantó la imagen que venía dejando el equipo.