Gracias, Federer, por haber hecho arte con tus raquetas
Por Daniel “Profe” Córdoba.
Hace unos días se retiró de las pistas o courts el más grande tenista de todos los tiempos: Roger Federer. Dicho esto y después de haber hablado con cientos de periodistas de todo lugar, edad y especialidad, he llegado a la conclusión de que cuando se habla de la grandeza de los deportistas, sí o sí deben separarse los que juegan en equipo o los que compiten individualmente.
Su tenis artesanal, delicado, mágico, con un revés a una mano (casi todos usan las dos), con su saque indescifrable, con sus voleas que parecían pinchar las pelotitas, con su control mental fenomenal para ganar los tie break, y muchas virtudes más.
Verlo desplazarse en polvo, césped o cemento casi como un bailarín sin esfuerzo me anima a ser concluyente: para quien suscribe, el mejor tennisman de todas las eras. Desde este espacio, quiero expresar: gracias, Roger Federer, por haber hecho arte con tus raquetas.