Mascherano y Rojo, los escoltas del mejor del mundo

La Pulga volvió a demostrar lo que es anotando dos goles determinantes en el triunfo ante Nigeria. El volante levantó su nivel y el lateral ratificó su buen momento 

Resulta absolutamente imposible no ser redundantes a la hora de encontrar adjetivos calificativos para definir la actuación de Lionel Messi. El mejor jugador del mundo volvió a demostrar con oportunismo en el primer tanto y pura elegancia en el segundo, que desde su juego, el seleccionado argentino puede ilusionarse con llegar lejos en esta Copa del Mundo. 

La Pulga fue el alma albiceleste, de sus pies nacieron las mejores jugadas colectivas, y a pesar que varias veces lo frenaron con infracciones desmedidas, los minutos que estuvo en cancha fue determinante para consumar el triunfo ante las Aguilas Verdes africanas y convertirse en la máxima figura del conjunto de Alejandro Sabella. 

La actuación de Javier Mascherano merece un apartado. El volante fue puro corazón, corrió por él y por muchos de sus compañeros demostrando de qué manera se debe jugar un Mundial y aunque terminó con un golpe, se mantuvo dentro de la cancha. El rendimiento argentino mejoró en relación a los partidos anteriores y mucho tuvo que ver la actuación de Angel  Di María. El volante del Real Madrid estuvo más participativo, desequilibró permanentemente con su gambeta y velocidad, además de correr hasta el agotamiento. 

Un escalón más abajo del podio imaginario emerge la figura de Marcos Rojo. El ex Estudiantes fue el más sólido del fondo junto a Garay pero se destaco porque  tuvo su bautismo mundialista en la red. Buen partido.