Por Galopón
Se logró poner el carro en la huella
Es de esperar que 2021 sea el año que se caracterice por el despegue del turf platense, para el bien de la actividad de la cual vive todo el Barrio Hipódromo
Pasada la Navidad, nos encaminamos hacia el disco de un fin de año atípico, sufrido, tremendo, inédito, increíble. Póngale, señor lector, el adjetivo calificado que usted quiera para definir algo que fue único y, esperemos, irrepetible.
El turf, como Lázaro, en medio de la pandemia escuchó la voz que le decía: “Levántate y anda…”. Y a los tumbos, se levantó y comenzó a andar. Costó poner el carro sobre la huella, contando para ello con mucha paciencia de los “dueños” de dicha actividad, que no son otros que los propietarios.
En el regreso de las carreras, Palermo dio el puntapié inicial a mediados de septiembre; el 1° de octubre lo siguió La Plata, subiendo la vara ya que lo hizo con público en sus instalaciones, pero sin acceso a las tribunas. Con los protocolos del caso funcionó como una agencia. Apuesta que podía salir bien… como mal. Pero como Dios fue, es y será burrero, dio buen resultado. Enseguida completó San Isidro la trilogía de los tres hipódromos más importantes del país funcionando. Como se pudo se completó la cartilla clásica, como por ejemplo en el caso de La Plata, disputándose antes el GP Dardo Rocha que el Jockey Club y el GP Provincia de Buenos Aires, que en un calendario normal es todo al revés.
En lo que respecta a la pista del Barrio Hipódromo, se pudo llegar al final del año con un saldo, si se puede ser benévolo, positivo. Sabemos que el hipódromo depende de ese 9 por ciento que le aporta por la Ley del Turf los bingos y tragamonedas bonaerenses para su funcionamiento. Con estos lugares cerrados (recién reabrieron el 14 de diciembre pasado), se hizo muy difícil buscar recursos genuinos y todo funcionó “atado con alambre”.
Seguramente para febrero venidero volverá a tener ese beneficio monetario en las arcas que le permitirá encarar el calendario hípico con algún desahogo económico. Y sobre todo ponerse al día con el pago de los premios.
El Clásico Clausura
Mañana será la última reunión del año en el hipódromo local para la cual fueron ratificados 195 caballos desparramados en 15 carreras (dicen que las autoridades buscan alcanzar una recaudación superior a los 27 millones de pesos), pero llama la atención que se hayan eliminado 170 caballos.
El Clásico Clausura (GII-2.000 mts.), carrera central, hará honor a su nombre y pondrá fin al cronograma de carreras de grado. Abierto para ejemplares de 3 años y más edad, se correrá en decimotercer turno, a las 18.30 y han confirmado su participación 13 ejemplares.