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Se viene una gran fiesta albirroja en City Bell
El Country tendrá una gran despedida para el plantel de Estudiantes mañana, cuando la delegación pincharrata viaje a 60 y 118 para el clásico.
Vamos tachando las horas para vivir lo que será una nueva edición del Clásico Platense entre Estudiantes y Gimnasia, con el Lobo como local en el Juan Carmelo Zerillo. Allí, no podrán decir presente los fanáticos del elenco albirrojo, algo que no sucede desde hace mucho tiempo.
No solo sucede cuando el Pincha es visitante, ya que tampoco los simpatizantes del elenco Mens Sana pueden presenciar los encuentros en lo que fue la estadía del León en el Diego Armando Maradona, la cancha de Quilmes o el último en el Hirschi. Desgraciadamente vivimos los derbis de la ciudad así desde mediados de 2009.
Con esto en la espalda, la situación no impide que la familia pincha pueda armar una gran fiesta para disfrutar al encuentro, pero principalmente para acompañar a los futbolistas en la previa del partido, cuando la comitiva pincharrata tenga que viajar desde el predio Mariano Mangano hasta el campo de juego ubicado en 60 y 118.
Todos lo viven de una manera muy especial, pero desde las 13 va a comenzar una fiesta roja y blanca para hacerle sentir la importancia de este partido a los futbolistas dirigidos por Eduardo Domínguez, entrenador que estará afrontando su primer Clásico Platense.
Las agrupaciones de Estudiantes informaron cómo será la despedida del plantel, al tiempo que también habrá una pantalla gigante en el Country de City Bell para vivir el partido que comenzará a las 16:30, cuando así lo disponga el árbitro del juego Facundo Tello.
Habrá bombos, banderas, color y sobrará el aliento para los protagonistas, al tiempo que se marcó encarecidamente que al ingreso todo el mundo se dirija a la zona de las parrillas, para no alterar el funcionamiento de la jornada. “Varios deportes del club juegan al mediodía y merecen el mismo respeto que el plantel profesional”, mencionaron en un comunicado en redes sociales.
Todo el mundo pincha pretende vivir un gran momento y, por supuesto una vez que empiece a girar la pelota, que Estudiantes gane, para seguir estirando una racha que lleva más de 13 años sin derrotas. La última vez fue aquella derrota 3 a 1 en el Bosque, donde Juan Sebastián Verón marcó el único gol de un equipo que luchó hasta el final el título con Argentinos y que tenía a un magistral José Sosa en el plantel que venía de caer ante el Barcelona en el Mundial de Clubes.