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El “desnudo” de Moria Casán
En su paso por un show íntimo, la diva y sus parejas formales compartieron su intimidad y sus deseos.
Antes de la llegada del 2000, la vedete y capocómica Moria Casán se convirtió en la reina de los talkshows de la tarde. Tras un tiempo prudencial dedicándose a ello, decidió abrir el juego a una emisión nocturna llamada La noche de Moria, que aunaba lo mejor de la farándula vernácula y las relaciones de pareja.
Para una emisión más que especial, el diván estuvo muy bien pensado para analizar y exponer los vínculos entre la “One” y sus dos exmaridos, el actor Mario Castiglione y el empresario Luis Vadalá, por entonces pareja estable. Sin perder ni un minuto de posibles explosiones, la producción dejó que Jorge Ricardo Rial, creador de Intrusos en el espectáculo, fuera quien condujera esta entrega. Así, dando inicio al show, los caballeros se saludaron con un apretón de manos, mientras que la diva expectante los observaba sentada con un catsuit negro a puro encaje que dejaba entrever su figura eterna.
Tras jurar que dirían toda la verdad y nada más que ello, la actriz dio el primer paso para romper el hielo y comenzó a relatar que Castiglione fue una persona muy importante en su vida; ambos tuvieron a su única hija Sofía Gala, una actriz ya consagrada, y luego decidieron continuar por caminos separados. Los celos fueron una de las causas por las que se peleaban a menudo, sumado a la adicción que el humorista mantenía hacia el alcohol, razón por la que fue diagnosticado con una enfermedad terminal que terminó llevándolo hacia la muerte. Entre los dimes y diretes, se echaron en cara la falta de demostraciones de cariño, que, para la “One”, escaseaban o no existían. Por otra parte, también hablaron de sus roles como padres: la falta de consenso en las decisiones y la ausencia de Castiglione en momentos de entretenimiento o de actos escolares, cuestiones que resultan vitales en la crianza de los infantes.
Luego le llegó el turno a Luis Vadalá, que acompañó a la diva por más de una década. Durante ese período, fue su esposo y se convirtió en un empresario en rubros varios. Asimismo, se desempeñó como una figura notable en la vida de la heredera. Sin embargo, los años, las asperezas y la diferencia de criterios hicieron mella; y la pareja se terminó unos años después.
Antes de finalizar la situación, Rial solicitó que Castiglione dijera unas palabras. Así fue que este esbozó el amor que le tuvo a la morena, el respeto como madre y persona. Luego le llegó el turno a Luis, que admitió no saber cómo expresar su pasión pero expresó los sentimientos en su haber.
Para cerrar, Ana María Casanova (Moria) afirmó que el hombre más importante de su vida fue su papá y cerró este show que dejó una gran huella en la televisión argentina.