Revelan más detalles del affaire entre Eugenia Suárez y Mauro Icardi

Unas semanas atrás, Wanda Nara y Mauro Icardi atravesaban un momento difícil en su vínculo marital y decidieron sentarse a charlar. Además, se revisaron los teléfonos celulares, y ella se encontró con una sorpresa desagradable. Sucede que el deportista estuvo intercambiando mensajes subidos de tono con la actriz Eugenia Suárez, a través de una red social. Además, compartieron videos eróticos. Estos hechos fueron innegables ya que las pruebas estaban a la vista. Entonces, Wanda decidió refugiarse en su trabajo y dejó la casa familiar para tomarse unos días de meditación y finalmente perdonar a su marido. Sin em­bargo, realizó un crudo escarnio público contra la tercera en discordia, quien publicó una carta defendiendo su buen nombre para luego llamarse a silencio y abocarse a su trabajo como actriz en el viejo continente.

Tras la lluvia de escándalos, la empresaria y representante futbolística Wanda Nara decidió perdonar a su esposo y retomaron la vida en común. Además, compartió una carta dando las buenas nuevas a través de Instagram. Pero el vendaval volvió a arrasar todo una vez más, cuando un amigo de la China le envió un correo electrónico a Nara comentándole que su esposo no solo mantuvo correspondencia epistolar, sino que también organizó un encuentro clandestino en París para darle rienda suelta a sus pasiones más bajas. En esta ocasión, los gastos corrieron a su cargo y le obsequió una camiseta de precios millonarios que formó parte de una edición especial diseñada. El hombre aprovechó su soledad, pues en ese momento Wanda se encontraba pa­seando junto a sus hijos y Zaira Nara, que cayó de visita para una tertulia familiar. Cuando la bomba explotó, Mauro insistió en que solo se trató de una aventura digital, pero las pruebas lo comprometen en demasía. Además, habría tenido un cómplice para poder cumplir con todos sus compromisos, y habría sido el marido de Zaira Nara. Asimismo, Wanda volvió a irse de la casona familiar; dejó a las niñas al cuidado de su padre, mientras que sus herederos mayores están a cargo de su exmarido en primeras nupcias. Así ella puede completar las sesiones fotográficas de su campaña textil y también cumplir con las reuniones que pautó para su próxima participación en la televisión italiana. En todo momento, estuvo acompañada por su peinador y maquillador, Kenny Palacios, y su séquito de amigas que se destacan por la paciencia y el amor incondicional.

Con tanto caos y luego de arrastrarse en búsqueda del perdón, Mauro decidió cerrar sus perfiles en el universo digital hasta nuevo aviso. Por su parte, Eugenia Suárez, que fue señalada como “la rompe hogares”, regresó a su país para que sus hijos puedan ver a sus padres. También reconoció que está saliendo con un empresario español que se dedica al rubro de las motocicletas de competición, quien habría coincidido en su camino cuando estuvo en Madrid filmando su primera participación en una novela que trata sobre el tráfico de personas para someterlas a la esclavitud sexual. En ese contexto, fue vista en una discoteca a los besos con su amor, y tiene pensado regresar al Viejo Continente ni bien pueda solucionar sus inconvenientes laborales y la mudanza a su nuevo hogar.