entrevista

Tomás Gómez Bustillo: “Lo ideal es que sientan algo en la butaca de cine”

Continúa en cines la producción protagonizada por Mónica Villa y que profundiza en la fe y los mitos alrededor de ella.

La ópera prima de Tomás Gómez Bustillo, Crónicas de una santa errante, continúa en salas tras su estreno. Para conocer más de este relato atravesado por el realismo mágico, hablamos con Gómez Bustillo.

―¿Cómo surgió la idea de la película?

―La idea de la película surgió primero como una imagen que se me vino a la mente cuando estaba terminando mis estudios de cine. La imagen de una persona que brillaba, llena de luz, en la superficie aparentaba ser perfecta. Pero al mismo tiempo la veía deambulando por un campo inmenso, oscuro. Sentía cierta tristeza, cierta melancolía. Rápidamente la asocié con un paisaje rural que yo conocía muy bien, el pueblo de Antonio Carboni en la provincia de Buenos Aires, y algún tiempo después, con el mito rural de la luz mala.

―¿Cuándo supiste que Mónica tenía que ser la protagonista?

―Cuando empezamos a trabajar con Pablo Lozano, el director de fotografía, fue él quien me sugirió a Mónica Villa para el rol de Rita. Hasta ese entonces, yo siempre me la había imaginado mayor a Rita, pero cuando él la nombró, no pude pensar en otra cara que no fuese la de ella para este personaje. Era perfecta. Además de ser una actriz icónica para el cine argentino.

―¿Cuál es tu vínculo con la fe y los “milagros”?

―Yo me crié en una familia muy católica. En mi infancia, la fe, los milagros, los espíritus de los que fallecieron, los ángeles y demonios; todos eran una parte invisible pero normal, casi cotidiana. Con el tiempo, yo me fui alejando de la religión pero esa fascinación con la irrupción de lo fantástico dentro de lo real fue algo que volví a hallar en la literatura del realismo mágico latinoamericano.

―¿Qué fue lo más difícil de encarar en este primer proyecto?

―Creo que lo más difícil de encarar este proyecto, en lo personal, es ese síndrome del impostor que te llega cuando empezás a armar un equipo, juntar los recursos, poner en marcha toda una máquina pero al mismo tiempo sabes que es tu primera vez, que sos un X, que no tenes experiencia, que quizás sea un desastre total la película. Pero bueno, es algo que es inevitable. Hay que atravesarlo y no dejar que esos miedos te impidan intentarlo.

Noticias Relacionadas