A días de un nuevo aniversario del crimen de Fernando Báez Sosa, Villa Gesell prepara homenajes

Se espera una manifestación con velas en la avenida 3, precisamente en el lugar donde mataron al joven, hecho por el cual se lleva adelante el juicio más mediático del 2023. En medio de la temporada de verano, la reflexión y la repercusión en la actividad nocturna de la ciudad balnearia.

El próximo jueves se cumplirán tres años de la trágica noche que interrumpió la tranquilidad en plena temporada de verano en Villa Gesell en enero del 2020.

La muerte de Fernando Báez Sosa, uno de los miles de jóvenes que eligieron esta ciudad para pasar el verano, cambió para siempre el paradigma de la noche en esta zona de la provincia.

Este año, después del brutal y fatídico desenlace, el aniversario no será uno más, ya que se llevará a cabo en el medio del juicio a los jugadores de rugby que quedaron filmados en la golpiza que terminó con la vida de este muchacho que soñaba con ser abogado.

Por estas horas, una de las normativas que se implementó y que cambió radicalmente las costumbres de este balneario, es la prohibición para poder hacer fiestas en las playas después de las 20.

La presencia de personal policial se ve por todas partes en motos, autos y camionetas, donde se vigilan y realizan recorridos en la zona.

Sin ir más lejos, desde que arrancó la temporada de verano la Policía suele desalojar las playas cada vez que ve un grupo de jóvenes con bebidas alcohólicas sobre el mar.

Además, la peatonal de calle 3 ya no volvió a ser la misma, ya que las velas y los panfletos alusivos a la fecha del homicidio prevalecen con el pedido de justicia en los negocios de los comerciantes, que en su mayoría son oriundos del lugar y no ven con agrado la mala fama que pueda pesar sobre el balneario por el comportamiento de un grupo menor de rugbiers.

Le Brique, el lugar donde comenzó todo

Esta discoteca que fue muy conocida por el caudal de jóvenes que pasaban las noches intentó abrir el día después al homicidio del joven, pero, tras el fuerte repudio y por la conmoción que dejó en la sociedad por lo ocurrido, dio marcha atrás.

Lo cierto es que después de lo que pasó, la nocturnidad en esta localidad balnearia no volvió a ser la misma. Si bien hay dos boliches donde concurrir, cambió tanto el ambiente que los adolescentes buscan otras alternativas para pasar sus vacaciones.

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