Argentina es uno de los países con más consumo de psicoactivos

Dos investigadores de la Universidad Católica Argentina (UCA) publicaron un estudio en el que analizan las últimas estadísticas vinculadas al consumo de drogas psicoactivas. El trabajo sostiene que hay alrededor de un millón y medio de personas con dependencia al alcohol o alguna sustancia ilícita. Argentina es uno de los países más afectados de la región, pero muy por detrás de lo que padecen en América del Norte u Oceanía

La última encuesta sobre consumo de sustancias psicoactivas en Argentina indica que el 8,3% de la población de entre 12 y 65 años consumió alguna droga en el último año. La más popular resultó ser el cannabis, seguida por la cocaína. En tercer lugar se ubicó el uso de tranquilizantes sin prescripción médica.

Ese porcentaje (8,3%) sitúa al país en lo más alto de la tabla de Latinoamérica, solo superado por Uruguay. Concretamente, el país oriental tiene una prevalencia anual de consumo de marihuana del 14% contra un 8,13% de Argentina. Respecto de la cocaína, la prevalencia anual es de 2,1% en Uruguay y de 1,67% en Argentina. Chile y Brasil son los otros dos países de la región que muestran altos niveles de consumo.

Sin embargo, la cantidad de personas que consumen psicoactivos en esta región es significativamente menor a los números que se registran en América del Norte u Oceanía, las regiones más afectadas por esta problemática. Por ejemplo, la prevalencia del consumo de cannabis en América del Sur es de 3,50, mientras que en el norte del continente es de 13,80 y en Oceanía es de 10,90.

Este presente argentino responde a un “marcado aumento de la prevalencia de consumo de drogas ilícitas en Argentina durante los últimos veinte años”, aseguraron los investigadores. Según precisaron, en 1999 el 2,9% de los argentinos había consumido alguna sustancia en el último mes, pero ya en 2017 ese porcentaje había llegado hasta el 5,7%.

Por fuera de las cantidades, el informe muestra que los consumos de sustancias psicoactivas tienen un correlato con problemas fisiológicos y cognitivos en sus usuarios, pero también en sus familias o afectos y en la sociedad en general. Un dato impactante de la investigación es que a mayor nivel socioeconómico mayor tendencia a usar sustancias peligrosas. Sin embargo, en las clases bajas se presenta el consumo de drogas más baratas y por ende de menor calidad y mayor perjuicio para la salud. “El consumo y la dependencia de drogas están especialmente arraigados en los barrios informales del país”, advirtieron.

En este sentido, también analizaron el abordaje sanitario de esta problemática y manifestaron su preocupación por las deficiencias en esta área. “Solo una pequeña fracción de las personas que padecen dependencia a sustancias psicoactivas reciben tratamiento, tanto en Argentina como en el resto del mundo”, indicaron.

De acuerdo a las estadísticas oficiales de 2019, en el país hay 1.300.000 personas con consumos problemáticos. De ellas, se estima que solo el 3,9% buscó tratamiento profesional. “Esta temática necesita ser abordada”, sentenciaron.