Bolsas, roedores y perros: vecinos desesperados piden ayuda en Altos de San Lorenzo
Los frentistas se ven afectados por la acumulación de los residuos. Esto se suma al problema de los animales que deambulan por la zona, que rompen las bolsas y se comen la basura.
Además de la fuerte ola de calor y la falta de agua que viene acechando a los platenses, se sumó ayer un nuevo reclamo en la zona sur de la ciudad que afecta a los vecinos de dos barrios puntuales: Altos de San Lorenzo y Aeropuerto.
Según explicaron en contacto con diario Hoy los vecinos de 77 y 19, la zona era una especie de pulmón por la vegetación que la rodea, pero que prácticamente en estos últimos años se ha vuelto un basural.
Ante la falta de la recolección diaria de las bolsas de basura que las personas van dejando en los cestos, en el lugar le han solicitado al delegado municipal que tome cartas en el asunto para evitar que esto no siga ocurriendo porque cada vez son más los desechos.
“Es increíble en lo que se está convirtiendo la zona. Necesitamos que se haga algo concreto para que se termine con todo esto en la región”, expresó indignada una de las vecinas que vive sobre la calle 77 en el sur de la ciudad de La Plata.
Cabe recordar que en el comienzo de la semana también Altos de San Lorenzo había dado que hablar por lo ocurrido en 90 y 134, en donde se reventó un enorme caño de agua y terminó inundando las veredas y algunas casas de la cuadra.
La falta de recolección diaria de basura llevó a que los frentistas de la calle 13 en barrio Aeropuerto suelan prender fuego las bolsas que se acumulan después de tres días sin que nadie se las lleve detrás del barrio Monasterio, entre 90 y 610.
Según contaron a este medio, la situación afecta en menor o menor medida a los barrios que están en la parte sur traspasando las fronteras del casco urbano, desde 120 hasta 137, en donde no suele haber recolección a diario: barrio Jardín, Villa Alba, Villa Zula, barrio Frisón, barrio Aeropuerto, parte de barrio Monasterio, Altos de San Lorenzo, la zona de la canchita de Villa Lenci y parte del barrio Cementerio.
En otra parte de la ciudad, en 613 y 4 ocurre lo mismo pero en esta esquina los perros del lugar se acercan a revolver las bolsas y terminan rompiéndolas. En otra oportunidad los frentistas del barrio Frisón pidieron a las autoridades que se instalen contenedores para que esto no siga pasando. Pero la situación continúa igual.
“Esta esquina está llena de perros rompiendo las bolsas. El tema es que vienen las levantan pero lo desparramado queda ahí. Y el olor putrefacto es insoportable, y más con 32 o 34 grados de temperatura con fermento que provoca todo eso que está ahí. Necesitamos que pongan los contenedores porque esto es inhumano”, comentaron con enojo.