El Peligro, una localidad sostenida por sus vecinos que cumple 143 años
Pese al crecimiento demográfico que ha tenido la zona, sus habitantes se sienten olvidados entre la inseguridad, la escasa infraestructura y la falta de servicios públicos
El 10 de noviembre de 1874, ocho años antes que la ciudad de La Plata, fue fundada la localidad de El Peligro. Fue bautizada con ese nombre por el riesgo de ser asaltadas que corrían las carretas que pasaban por la zona para llegar hasta el Puerto de Buenos Aires. Hoy, a 143 años de la fecha inaugural, los vecinos siguen siendo víctimas de la inseguridad y la desidia del Estado.
Con un gran crecimiento en materia demográfica, en los últimos 15 años El Peligro pasó de tener 2.000 habitantes a 8.000. Así, esta localidad de 104 km2, que limita con Abasto, Arturo Seguí y Melchor Romero, se ha convertido en una de las zonas más productivas del Gran La Plata. De hecho, además de ser el segundo polo avícola del país, aloja también una gran cantidad de productores de frutas, verduras y flores, como el caso de la comunidad japonesa en Colonia Urquiza.
Sin embargo, este progreso no estuvo acompañado de infraestructura ni servicios elementales para vivir dignamente: a esta zona del Gran La Plata no llegan el asfalto, las luminarias ni las instituciones. De hecho, las pocas que existen fueron fruto del loable trabajo de sus vecinos, que día a día realizan un esfuerzo inconmensurable para hacer de El Peligro un lugar más habitable.
Tal es el caso de Liliana Aller, presidenta y fundadora del Cuartel de Bomberos de El Peligro, una institución creada en el año 2015 que, con una dotación de 40 voluntarios, asiste a unos 10.000 vecinos. Sin dinero suficiente ni apoyo estatal, esta mujer decidió ceder el terreno para la creación de este espacio que, desde su fundación, ya tuvo intervención en 300 casos de siniestros, accidentes e incendios.
En relación con la situación que se vive en la localidad, Aller relató a este medio: “Tenemos enormes falencias en materia de infraestructura, no tenemos calles y necesitamos mejoras de zanjeo. Además, la inseguridad nos está golpeando muy fuerte. Por otro lado, tenemos una unidad sanitaria deficitaria y no contamos con médicos durante la tarde ni los fines de semanas”.
Indignada con la desidia por parte del Estado municipal, la fundadora del cuartel explicó: “No se hacen cargo de nada. Nos cansamos de reclamar y pedir cosas, pero el Municipio no atiende nuestros pedidos. En dos años de gestión, el intendente solo vino una vez y estuvo diez minutos. En cualquier momento se viene un corte de ruta para pedir por seguridad. Se le está reclamando al jefe comunal que declare la emergencia en seguridad”.
Pese a las adversidades, El Peligro sigue de pie, queriendo progresar. El empuje de los vecinos logró que durante la gestión anterior, gracias al Presupuesto Participativo, se asfaltaran 30 cuadras y se inaugurara la Escuela Secundaria nº 72, que se sumó a las históricas primarias nº 49 y nº 123. Sin embargo, los más chiquitos todavía esperan poden asistir al edificio propio del Jardín nº 945 (ver página 10), una promesa a la que el Municipio falta desde hace mucho tiempo.