Insectos, manchas de humedad y vidrios rotos

Así están las paredes del Museo de las Muñecas.

Al igual que ocurrió en la estación del tren y en el aeropuerto de la “Repu” de Gonnet, en la puerta del Museo de las Muñecas una persona abría y cerraba con una soga limitando el ingreso de las personas que tenían que pisar un cartón mojado de una caja desarmada que hacía las veces de alfombra para secarse los pies y tratar de evitar que se manchen los pisos. En el interior del lugar, además, se vieron insectos caminando por los vidrios de las ventanas, manchas de humedad en paredes y techos y ventanales rotos de los baños. A esto se le sumó el excremento de perros por los pasillos y corredores y los envases de gaseosas vacíos rodando por todo el lugar.

Cabe recordar que, como había anticipado este diario, muchos empleados de Control Urbano aprovecharon el receso invernal para tomarse unos días de vacaciones y, si bien hubo guardias con nuevos jóvenes que empezaron a recorrer las calles, en los espacios públicos como la República de los Niños, el Bosque platense y el Parque Ecológico la atención y el control no fue el esperado.

Confusión en el Museo de Ciencias Naturales

Además, en otros lugares en los que la Secretaría de Cultura de la Municipalidad tiene injerencia, como ocurre dentro del Paseo del Bosque, decenas de personas se sorprendieron por un cartelito que apareció en el ingreso al Museo de Ciencias Naturales, cuando minutos después de las 16 se anunciaba que la atención era de martes a domingo después de las 17.

Noticias Relacionadas