Preocupación por alacranes en zona de Parque Saavedra
Vecinos del barrio de 11 y 64 manifestaron nerviosismo y sorpresa por la aparición de estos arácnidos en época de bajas temperaturas.
En los últimos dos meses se detectaron al menos nueve casos de avistamiento de alacranes en la zona del Parque Saavedra, lo que genera preocupación en los vecinos de la región. Asimismo, en relación a su aparición en época de bajas temperaturas, provocó dudas sobre el origen y comportamiento de estos arácnidos, que suelen mantener hábitos nocturnos y proliferan normalmente en el calor.
Desde el Centro de Estudios Parasitológicos y de Vectores (Cepave), dependiente del Conicet, manifestaron que estos arácnidos “conviven con nosotros y son parte de la fauna que nos rodea, por lo que lo mejor es actuar preventivamente”.
De las más de 1.400 especies conocidas en el mundo, los especialistas aseguran que en nuestro medio habitan dos: el bothriurus bonariensis, que no es venenoso, de color rojizo y negro de hasta seis centímetros; y el tityus trivittatus, venenoso, de mayor tamaño cuya diferencia fundamental está en la cola, donde se ubica el aguijón y, debajo de este, una pequeña espina con la que atacan.
Frente a la situación de encuentro cara a cara con un alacrán, la clase de reacción no es una cuestión menor. Al respecto, cabe mencionar que los niños suelen ser los más expuestos. “Ante la aparición de un alacrán, el pequeño debe avisar a un adulto y no tocarlo”, recomendaron desde el Cepave.
En cuanto a los mayores, precisaron que “la mayoría de las picaduras se producen porque la persona se pica con el escorpión, en general como consecuencia de ponerse un zapato o meter la mano en un lugar donde había uno. De esta manera, es el individuo el que se pincha con el aguijón que tiene el arácnido en el extremo final del cuerpo”.
Los síntomas frente al contacto con esta especie se pueden dividir en dos áreas. Por un lado, de síndrome local, caracterizado por dolor, edema, eritema localizado, sensación de adormecimiento, anestesia alrededor de la inoculación o contracciones musculares fibrilares. Y por otro, el síndrome general que se vincula a piel pálida y sudorosa, cefalea, vértigo, astenia, somnolencia o excitación y delirio, secreción nasal, disminución de la frecuencia respiratoria y cardíaca, entre otros.
Como prevención, se recomienda revisar y sacudir la ropa de cama, prendas de vestir y calzado. También evitar caminar descalzo al aire libre en cercanía de cortezas de árboles, piedras y ladrillos. Finalmente se recomienda el aseo de ambientes, y controlar la entrada y salida de cañerías. Ante una picadura, se debe asistir al Centro de Asesoramiento y Asistencia Toxicológica del Hospital Interzonal de Agudos Especializado en Pediatría “Sor María Ludovica”, ubicado en calle 14 n°1631 o comunicarse al 0800-222-9911.