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Tres miembros de la tripulación de la Estación Espacial Internacional regresaron a la Tierra
La cápsula Soyuz MS-21 aterrizó en la estepa de Kazajistán con tres cosmonautas a bordo. La misión tuvo una duración de 195 días en el espacio. Entre otras tareas, realizaron más de 50 experimentos sobre biología y fisiología espacial.
La nave espacial rusa Soyuz MS-21 y su tripulación formada por los cosmonautas Oleg Artemyev, Denis Matveev y Sergey Korsakov aterrizó ayer en un lugar designado en la estepa de Kazajistán, a unos 150 kilómetros al sureste de la ciudad de Zhezkazgan.
Según las imágenes transmitidas en directo por la agencia espacial rusa Roscomos, los tres profesionales fueron extraídos del módulo de descenso Soyuz con sonrisas en sus rostros y bajo un cielo azul. Los estaba esperando un equipo de unos 200 especialistas en búsqueda y rescate, doce helicópteros, dos aviones y seis vehículos terrestres.
La tripulación había comenzado su misión en la Estación Espacial Internacional (EEI) a mediados de marzo, tres semanas después del inicio de la ofensiva rusa en Ucrania.
“Nos sentimos bien”, afirmaron los cosmonautas desde la cápsula durante el proceso de extracción de la nave tras su aterrizaje.
El primero en salir fue Artemyev, cerca de media hora después del aterrizaje, seguido posteriormente de Matveev y Korsakov, entre aplausos de los presentes. En cuanto al primero, vale destacar que se trató de su tercer vuelo espacial, y ha pasado en órbita un total de 561 días.
Los tres fueron atendidos inmediatamente por personal médico, que controló el estado de salud de los cosmonautas con mediciones de la presión sanguínea y la saturación de oxígeno.
Durante su permanencia en la EEI, los cosmonautas llevaron a cabo varias caminatas espaciales, además de labores de mantenimiento técnico y reparaciones de la estación orbital, así como una serie de experimentos científicos.
A su vez realizaron más de 50 experimentos sobre biología y fisiología espacial, ciencia de materiales espaciales, física de rayos cósmicos, desarrollo de tecnologías espaciales avanzadas y otros. También se conectó una impresora 3D y un horno de vacío eléctrico.
Cabe remarcar que los programas espaciales siguen siendo uno de los pocos campos de cooperación entre Moscú y Washington, pese a las fuertes tensiones entre Rusia y Occidente.
Asimismo, hace poco más de una semana Rusia lanzó la Soyuz MS-22 rumbo a la Estación Espacial Internacional con dos cosmonautas y el astronauta estadounidense Frank Rubio.
Investigaciones
En las últimas horas, la NASA informó detalles de las investigaciones científicas llevadas adelante en la semana del 19 de septiembre, que incluyeron pruebas de automatización de las funciones de mantenimiento y reparación de naves espaciales, así como la demostración de dos tecnologías para controlar naves espaciales pequeñas y robots.
Por ejemplo, “Amo-Express 2.5 realiza pruebas utilizando un software de soporte de decisiones para automatizar algunas actividades de mantenimiento y reparación de naves espaciales. En futuras exploraciones espaciales, como una misión a Marte, los retrasos importantes en las comunicaciones entre el espacio y la Tierra significan que los miembros de la tripulación deben realizar muchas tareas sin la asistencia del control de la misión”, precisaron desde la agencia espacial.
Además, remarcaron que trabajan en dos investigaciones relacionadas con la tecnología robótica para una futura exploración espacial, como así también para las aplicaciones en la Tierra.